Desde que escribió el programa del chip de segunda generación, Lin Yi no había pensado en Cisco.
Sin embargo, le habían robado la patente, y todavía tenía que vengarse por eso.
Ni siquiera había hecho un movimiento todavía, y ya habían intentado tenderle una trampa.
—Todavía no he descubierto quién está detrás de esto, pero empezaré con ustedes primero.
Lin Yi se estiró perezosamente al pensarlo, preparándose para trabajar.
Primero tenía que ver cuál era la misión del sistema.
Buzz, Buzz, Buzz...
Su teléfono vibró. Vio que eran dos mensajes emergentes del sistema.
Uno de ellos era una mala reseña.
Esto estaba dentro de las expectativas de Lin Yi.
Había regañado a esa mujer por teléfono justo ahora.
Probablemente no canceló el pedido, pero eligió completar el pedido y darle una mala reseña.
Sin embargo, otro mensaje sorprendió a Lin Yi.