Drenaje de Maná(2)

Después de la cena, Edwin regresó para limpiar el desorden.

—La Joven Dama perderá el control de sí misma en media hora. Permítame advertirle de nuevo, Señor Leon. No debe dañar ni un solo cabello de su cuerpo, sin importar lo que le haga. Si la hiere, su vida será lo último de lo que deba preocuparse, incluso si es por accidente.

—Muchas gracias por tu ánimo —Leo le dijo con voz sarcástica.

Edwin se inclinó ante Lia antes de salir de la habitación y cerrar las puertas de metal tras de sí.

—Solo queda media hora. ¿Qué vas a hacer hasta entonces? —Lia le preguntó.

—Me gustaría ahorrar mi energía, así que no voy a hacer nada —dijo.

—Leo, deberías prepararte —Lilith de repente le dijo después de que la habitación se quedara en silencio.

—¿Prepararme? ¿Cómo? Solo necesito usar Drenaje de Maná en ella, ¿verdad?