—¡Señorita Camille! ¿Qué pasó aquí? —Valery y su equipo se acercaron poco después de que Leo matara al Guerrero Demoníaco.
—¿Eh? ¿Cuándo llegaron aquí? —Leo les preguntó, fingiendo no saber de su presencia.
—Acabamos de llegar… Justo cuando decapitaste a ese Guerrero Demoníaco —dijo Conan.
—Ya veo —Leo murmuró antes de ignorarlos y volverse hacia Camille—. Ahora que el jefe del Valle de los Gigantes ha sido derrotado, los monstruos aquí deberían dejar de reaparecer infinitamente. Voy a pasar los últimos días limpiando los restos en este lugar.
—De acuerdo. También reportaré esta noticia al Gremio de Aventureros y a la Directora —Camille asintió.
—Vamos, Nina. ¡Solo nos quedan unos pocos días en este curso de entrenamiento! —Leo le dijo mientras abandonaba la escena.
—¡Leo! ¡Ven a la enfermería después de los resultados! ¡Tenemos mucho de qué hablar! —Camille le gritó mientras se iba.
—¡De acuerdo! —respondió él en voz alta.