Planes para la Independencia

Después de pasar la noche con Honoria, para disgusto de Linde, Berengar había logrado consolidar su relación con la joven Princesa del Imperio Bizantino; en cuanto a sus planes para su identidad como corsaria, decidió que lo mejor sería que mantuviera la farsa de Valeria Zoanara.

Berengar incluso la ayudó a crear una personalidad convincente que nadie cuestionaría. Los días de Lady Valeria de Antioquía habían quedado atrás. Ahora Honoria fingía ser Valeria Zonara, una huérfana de Constantinopla que creció como cautiva de piratas.

Durante los siguientes días, Berengar pasó mucho tiempo con Honoria. Ahora que eran pareja, quería mostrarle algo de amor. Por ello, dedicó mucho tiempo a la joven, saliendo en citas y llevándola a la cama.