Conspirando contra los Conspiradores

Sin embargo, era suficiente para cumplir su propósito, y después de terminar su baño, Berengar se vistió con su atuendo extravagante antes de reunirse con Adela. La joven parecía visiblemente estresada, como si hubiera estado contemplando qué acciones tomar durante todo su sueño.

No obstante, Berengar tomó a su pequeña prometida y la empujó hacia sus brazos mientras acariciaba su sedoso cabello dorado. La chica acababa de salir de sus aposentos antes de encontrarse con Berengar, y como tal, estaba curiosa acerca de la información que Berengar había podido recopilar la noche anterior.

Así que miró a su alrededor cautelosamente para asegurarse de que nadie más estuviera cerca antes de hacer la pregunta que tenía en mente con una voz calmada.

—¿Qué descubriste?