Comenzando con las fuerzas que rodean a los Vampiros situados en el Inframundo, eran una fuerza que aquellos en la Expansión Oscura lograron colarse por los ojos de los Celestiales en el período de los últimos 1000 años a medida que crecían en nombre y poder en la Expansión de Luz.
Los Vampiros mantenían una relación especial con algunas figuras poderosas en la Expansión Oscura a través del ser poderoso que mantenía a toda la raza en su hombro, el Progenitor Vampiro.
Con su muerte siendo uno de los muchos resultados de la guerra de hace más de mil años, los Vampiros estaban más que dispuestos a actuar como espías en territorio enemigo, convirtiéndose en una fuerza estable durante los últimos cien años a medida que se destacaban en el Inframundo.
Los Vampiros también encajaban perfectamente en esta tarea ya que poseían habilidades que permitían completa secrecía, las cualidades encubiertas de sus técnicas les permitían moverse sin obstáculos durante los últimos cientos de años.