La Reina Serpiente Caara, que se encontraba en la cúspide del Mundo de los Magos, observaba las figuras doradas que brillaban con luz mientras la ideología de los Celestiales llegaba a su corazón con extrema precisión.
A ellos no les importaba cómo eran percibidos, mientras los seres les temieran y obedecieran, mientras conocieran su terrible poder, ¡eso era todo lo que importaba! Su expresión furiosa se suavizó mientras pronto se volvía carente de emociones, sus sentidos percibían a los muchos Magos que se agrupaban alrededor de la base central cerca de ella mientras se preparaban para luchar contra los dos Celestiales invasores. Al observar esta escena, algo pareció hacer clic en la mente de la Reina Serpiente mientras palabras carentes de emociones dejaban sus labios rojos mientras su cuerpo comenzaba a burbujear con poder.
—Entonces que así sea. —murmuró la Reina Serpiente.
ESTRUENDO.