Espada y Oro

Después de que Su Yang dejara la Sala de Misiones, regresó a casa para limpiarse el sudor que había recibido durante su cultivo con Lan Liqing y cambió las túnicas que recibió del Salón de Medicina.

Después, fue al Tesoro de Perla Blanca para prepararse para el viaje al Valle del Trueno, que estaba a unos pocos cientos de millas de la Secta de la Flor Profunda.

—¿Eres tú otra vez? —el anciano estaba sorprendido de ver a Su Yang aparecer allí. Pensó que Su Yang ya habría consumido la Flor Pura de Yang, sin embargo parecía perfectamente bien—. No, se veía un poco diferente, como si hubiera algo profundo en él.

—¿Qué pasó con la Flor Pura de Yang? ¿Te arrepentiste en el último momento? No acepto devoluciones aquí en el Tesoro de Perla Blanca, ¿sabes? —dijo el anciano por si Su Yang quería pedir un reembolso.

—Estoy aquí por una espada y algo de oro —dijo Su Yang tranquilamente, ignorando deliberadamente las preguntas del anciano.

—¿Espada y oro? ¿Por qué necesitas algo así?

—Acepté una misión que requiere que cace algunas bestias. El viaje será largo, y necesito al menos un arma para defenderme cuando llegue el momento.

El plan de Su Yang tenía al anciano confundido. ¿Por qué obtendría una Flor Pura de Yang y luego saldría a cazar unos días después? Nada tenía sentido en la cabeza del anciano.

—¿Qué estás cazando? —preguntó el anciano con una expresión casual.

—Anciano, con todo respeto, estoy apurado. No recuerdo que el Tesoro de Perla Blanca haya sido tan cuidadoso con un simple Discípulo de la Corte Exterior como yo —dijo Su Yang, su voz aún tan despreocupada como siempre.

—¡Tú...! —el anciano estaba obviamente enojado por los comentarios rudos de Su Yang, pero no dijo nada y solo frunció el ceño.

Después de un momento, dijo en un tono reservado:

—Tienes razón… He sido irrazonable. No hay necesidad de que me involucre en tus asuntos. ¿Qué tipo de espada quieres? Las normales costarán alrededor de 5 Puntos Premium. ¿Y qué hay del oro? Será de 10 Puntos Premium por uno de oro.

—Solo una espada de acero normal servirá. En cuanto al oro… quiero 10 de oro.

Su Yang le entregó los pocos Puntos Premium que le quedaban después de comprar la Flor Pura de Yang, y ahora estaba quebrado nuevamente.

—Regresaré en un momento —dijo el anciano después de confirmar que era la cantidad correcta.

Unos momentos después, el anciano regresó con una espada en una funda de cuero negro y una pequeña bolsa marrón.

Su Yang aceptó los artículos y se fue poco después.

Después de que Su Yang desapareció por unos minutos, el anciano llamó a un reemplazo y desapareció hacia la Sala de Misiones.

—¡Anciano Zhao!

Cuando los ancianos en la Sala de Misiones notaron la presencia del anciano, todos se pusieron de pie e inclinaron con respeto.

—¿Un Discípulo de la Corte Exterior llamado Su Yang vino aquí hoy por una misión? —preguntó el Anciano Zhao entonces con una expresión seria.

—¿Su Yang? Aceptó una misión de caza para el Valle del Trueno hace solo unos minutos —dijo el que registró a Su Yang en los libros de registro.

—¿Cazando en el Valle del Trueno? ¿El lugar donde los Gatos Relámpago han estado corriendo desenfrenados últimamente? ¿Por qué alguien en el nivel 3 del Reino del Espíritu Elemental aceptaría ese tipo de misión imposible? —reflexionó el Anciano Zhao.

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```—Déjame ver ese libro de registro —dijo al anciano a cargo.

—Aquí tienes, Anciano Zhao.

—Hmmm… déjame ver —. ¡¿Nivel 1 del Reino del Espíritu Profundo?! —El Anciano Zhao no pudo evitar exclamar en voz alta después de ver el libro de registro, sonando como si acabara de ver un fantasma, su fuerte voz sorprendiendo a todos dentro de la Sala de Misiones.

—¿Hay algo mal con el libro de registro, Anciano Zhao? —preguntó el anciano con una expresión preocupada.

Sin embargo, el Anciano Zhao solo continuó mirando el libro de registro como si estuviera en un trance—. ¿Cómo podría estar en el nivel 1 del Reino del Espíritu Profundo cuando estaba en el nivel 3 del Reino del Espíritu Elemental hace solo dos semanas?!

El Anciano Zhao repentinamente se dio cuenta de por qué sintió una sensación extraña al ver a Su Yang. Aunque era apenas reconocible, era un aura profunda que solo alguien en el Reino del Espíritu Profundo podría emitir, algo que no existía en él antes de obtener la Flor Pura de Yang.

—¡Ese niño realmente logró consumir con éxito la Flor Pura de Yang, algo que ni siquiera yo me atrevería a intentar! ¡Su base de cultivo incluso se disparó por eso!

Cuando el Anciano Zhao descubrió la verdad, quedó conmocionado hasta el fondo. ¿Cómo podría un mero Discípulo de la Corte Exterior en el Reino del Espíritu Elemental consumir una Flor Pura de Yang cuando incluso él, un experto en el Reino del Espíritu Terrestre, tendría dificultades para consumirla?

—¡Me han jugado! ¡Ese bastardo Su Yang es tan astuto que parece un niño! ¿Quién fue el que dijo que era un incompetente? ¡Ese tipo es un monstruo! ¡Tengo que informar esto a los maestros de la secta lo antes posible!

El Anciano Zhao miró al anciano encargado del libro de registro y dijo:

—¡A menos que yo te lo diga, no muestres el libro de registro a nadie más! ¡Esta es una orden directa!

—¡Sí, Anciano Zhao!

Después de eso, el Anciano Zhao dejó la Sala de Misiones rápidamente, dejando a todos allí perplejos.

—Para lograr que el gran Anciano Zhao se altere tanto… ¿Quién es este Su Yang? —Los ancianos de la secta allí se preguntaban en silencio.

—¿Me pregunto si ese anciano logró averiguarlo ya? —se preguntó Su Yang mientras se acercaba a la puerta principal que lo llevaría al mundo exterior.

Cuando estaba en el Tesoro de Perla Blanca, sabía que el Anciano Zhao había estado sondeándolo todo el tiempo, casi como si estuviera investigándolo.

—Es solo una Flor Pura de Yang, pero la están tratando como si fuera algún tipo de medicina divina… Aiya… qué dolor de cabeza… —suspiró Su Yang para sí mismo.

—¡Alto! ¿A dónde crees que vas, Discípulo de la Corte Exterior? —Los guardias de la puerta de entrada detuvieron a Su Yang cuando lo notaron acercarse.

—Tengo negocios en el Valle del Trueno —. Su Yang les mostró la misión que recibió de la Sala de Misiones.

Los guardias examinaron el sello en el papel de la misión y confirmaron la autenticidad del sello.

—Muy bien. Cuídate allá afuera.

Abrieron la puerta, y Su Yang salió casualmente, desapareciendo pronto de la vista de los guardias.