Capítulo 41: Usando la espada del rey

—¿Qué? —Long Chen preguntó mientras se giraba hacia ellos.

—Maestro Long, como ya le hemos dicho, tenemos una deuda. Nos dimos cuenta de que no somos lo suficientemente fuertes para lograr el éxito en este bosque de bestias simplemente cazando, y lo peor es que solo podríamos traernos problemas interminables. —dijo Xue mientras sostenía las manos de Mei.

—Sí, y dado que el gran maestro es del supremo Clan Long, ¿podemos pedirle que nos contrate como uno de los sirvientes del clan? Aunque ya nos salvó la vida y no deberíamos pedirle ningún favor, ¿puede aceptar nuestro único y egoísta pedido? Trabajaremos diligentemente y no lo decepcionaremos, maestro. —Xue y Mei pidieron al unísono mientras mantenían sus cabezas inclinadas.

«Ah, deben haber oído que los tres grandes clanes pagan generosamente a sus sirvientes, quieren usar mis conexiones para poder trabajar para el Clan Long. Supongo que no hay problema en eso», pensó Long Chen mientras les daba a las dos mujeres una mirada silenciosa.

—Está bien, aceptaré su solicitud. Mi carruaje está afuera del bosque. Entre los tres carruajes que verán, es el que está más lejos de la entrada. Quédense allí hasta que salga. —Long Chen les dijo antes de retomar su agenda.

Pero antes de que pudiera dar un paso, volvió a hablar. —Advertencia justa, si alguna vez divulgan lo que sucedió hoy en este bosque, o difunden rumores relacionados con ello, deben saber que no perdonaré a las dos, incluso si son simples mujeres. Terminarán como esos tipos en el suelo.

El momento en que las dos escucharon la voz de Long Chen, su celebración se detuvo. No pudieron evitar temblar al pensar cuánto tiempo había pasado desde que Chen mató a toda la gente delante de ellos.

Después de un rato, ambas comenzaron a caminar hacia la salida.

Mientras tanto, Long Chen continuaba avanzando, más y más profundo, hasta que finalmente sintió algo. Luego usó su sentido divino. En cuanto vio que una bestia espiritual etapa 10 corría hacia él, se sorprendió. Sumado a eso, una escasa distancia de 100 metros los separaba. No había nadie más cerca salvo esa Bestia espiritual.

—¡Alas de demonio celestial! —Long Chen usó sus alas y voló hacia arriba, sentándose en una rama alta de un árbol cercano después.

En unos segundos, esa Bestia espiritual llegó allí y comenzó a pasear su mirada por los alrededores.

«¡Una Pantera de Siete Colores! ¡Esta va a ser difícil! Esta es una Bestia espiritual de nivel máximo con ofensiva y defensa máxima. Su velocidad es incluso mejor que la mía. ¿Debería pelear con ella? Si lo hago, necesito encontrar la oportunidad adecuada», pensó Long Chen para sí mismo.

«He luchado con una Bestia espiritual en la etapa 10 en la formación del Salón del Tesoro. Por lo tanto, sé que el destructor de montañas no tendrá mucho efecto en la defensa de una Bestia espiritual de este nivel. Supongo que finalmente es hora de usar eso. Espero que no me decepcione.»

Finalmente, Long Chen decidió no usar la espada que había estado usando hasta ahora.

—Veamos si haces honor a tu nombre, espada del rey —murmuró Long Chen para sí mismo mientras sacaba la espada del rey de su anillo de almacenamiento. No había usado esta espada hasta ese momento, considerando que no había enfrentado un oponente difícil como hoy.

Tan pronto como la espada del rey se materializó, el aura de la fuerte espada se extendió rápidamente en la atmósfera. Era como si el rey de las espadas se hubiera despertado. Incluso la pantera de siete colores sintió este aura, lo que la llevó a mirar hacia el cielo.

En el instante en que miró hacia arriba, vio a un humano con una espada dirigiéndose hacia ella a gran velocidad. ¿Y su distancia? Justo por encima de ella.

Una capa de armadura defensiva apareció alrededor de la Pantera de Siete Colores mientras intentaba defenderse del ataque. Sin embargo, la espada de Long Chen rompió fácilmente esta armadura, seguida de la aparición de una larga herida en su cuello.

—¡ROAR! —La Pantera de Siete Colores gritó de agonía al sentir el dolor de tener herido su cuello.

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Por otro lado, Long Chen puso algo de distancia entre él y la bestia.

—Siete formas de la espada santa - Cuarta forma: ¡Desolación! —sin darle a la bestia una oportunidad para contraatacar, Long Chen atacó a la Pantera de Siete Colores con su habilidad marcial ofensiva más fuerte.

En tan solo unos momentos desde su ataque inicial, la cabeza de la Pantera de Siete Colores fue cortada y cayó al suelo. Yacía sin vida frente a Long Chen.

«Comparado con la prueba en la 5ª etapa de la formación del Salón del Tesoro, esta pelea fue mucho más cómoda», pensó Long Chen para sí mismo.

—Los últimos días en esta naturaleza salvaje han sido efectivos. He ganado más destreza en todas mis habilidades e incluso he dominado la 4ª forma de las siete formas de la espada santa después de pasar por tantas batallas —dijo Long Chen, con satisfacción en su voz.

—Aunque esta es la habilidad ofensiva más fuerte que conozco —incluso jugó un papel esencial en matar a esta pantera de siete colores—, la mayor parte del crédito se debe a esta espada del rey. Su fuerza superó con creces lo que había supuesto antes.

Long Chen suspiró mientras le daba a la espada una rápida mirada desde la punta de la hoja hasta la empuñadura.

—En la prueba anterior en el Salón del Tesoro, apenas podía hacer una muesca en una Bestia espiritual etapa 10 con mi espada. Pero esta espada del rey fue suficiente para matarla. Las armas de Grado Espiritual pico son poderosas. No es de extrañar que tantos las deseen —murmuró Long Chen mientras recogía la cabeza de la Bestia espiritual y la guardaba en su anillo.

Con eso, Long Chen continuó su viaje hasta que pasó otra noche.

«Maldita sea, ¿cuán grande es este bosque? He estado caminando durante más de dos días y aún no los he encontrado. Según mi conocimiento, he estado viajando tan rápido. Y aún así, no los he alcanzado, lo que solo puede significar que también están pasando por este bosque bastante rápido. ¿Pero por qué? ¿Realmente vinieron aquí por la experiencia, o por otra cosa que están tan apurados?» pensó Long Chen, pensando largo y tendido, mientras usaba su sentido divino para revisar sus alrededores.

Sintiendo que nadie estaba en su rango de sentido divino de 200 metros, nuevamente voló usando alas de demonio celestial para montar su hamaca.

«Siento que puedo romper hasta el pico de la 5ª etapa del reino de Refinación del Espíritu esta noche», contempló Long Chen mientras comenzaba su cultivo usando una técnica de cultivo sin nombre.

No había dejado de cultivar, asegurándose de hacerlo todas las noches desde que ingresó al bosque negro del norte. Long Chen cultivó durante bastante tiempo antes de finalmente alcanzar el éxito. Alcanzó el pico de la 5ª etapa del reino de Establecimiento del Espíritu.

—Hah... ya puedo sentirme más fuerte que antes. Sólo un poco más y seré un cultivador del reino de Establecimiento del Espíritu de la 6ª etapa —dijo Long Chen mientras sonreía.

Long Chen comenzó a cultivar un poco más antes de decidir detenerse. Sacó el huevo de bestia de su anillo de almacenamiento. Había adquirido este objeto al fondo del acantilado celestial y comenzó a alimentarlo con su qi.

Long Chen hacía esto al menos una vez al día, porque sabía que esto ayudaría al huevo en su proceso de eclosión. Después de hacerlo, colocó el huevo de nuevo en su anillo de almacenamiento mientras decidía que era hora de dormir.

Al día siguiente, Long Chen decidió levantarse temprano y continuar su viaje. Después de que pasara medio día, finalmente obtuvo una pista de la ubicación de la persona que estaba buscando a través de su sentido divino.