Capítulo 89: Aprendiendo otra Ley

Este carácter antiguo era de color negro azabache, pero ocasionalmente se podían ver algunas motas de luz brillando dentro de la oscuridad. Al ver el patrón, Long Chen tenía la sensación de que de alguna manera representaba el espacio.

Long Chen miró su núcleo rojo, pero todavía lucía igual, como un sol ardiente rojo iluminando su espacio Marcial. Sacó su conciencia de su espacio marcial después de haberlo observado minuciosamente.

—Hay un nuevo patrón en las manos de mi Alma Marcial. ¿Qué es eso? —Long Chen mirando a Xun.

—No tienes que preocuparte por eso. Eso solo significa que has aprendido la ley del espacio. El carácter en las manos de tu Alma Marcial representa la ley del espacio y que ha ganado afinidad con el espacio —Xun respondió casualmente a Long Chen.

—Oh, por cierto, cuando dijiste que la gente tarda muchos años en aprender la ley, ¿te referías a que ese es solo el tiempo que lleva formar una semilla de la ley de ese elemento? —Long Chen preguntó.

—Sí, las personas que comprenden la ley por sí mismas sin ninguna ayuda externa comienzan por tener una semilla de la ley después de sus años de arduo trabajo. Aquellos que no tienen la línea de sangre del Maestro y usan un orbe de la ley para la comprensión ni siquiera obtienen la semilla de la ley. El orbe solo les ayuda a llegar a mitad de camino. Aprenden muchas cosas sobre la ley del orbe, excepto lo principal, la esencia de esa Ley. Después de eso, necesitan esforzarse por entender la esencia de esa ley, completar su comprensión de la ley y finalmente formar una semilla de ley. Pero en ambas situaciones, la semilla de la ley formada es normal. Mientras que, dado que estos orbes fueron fabricados especialmente para los sucesores del maestro, la semilla de la ley que tienes es especial —explicó Xun.

—¿Qué tiene de especial? —Long Chen preguntó.

—Lo sabrás cuando llegue el momento. De todos modos, estoy cansada de hablar tanto. Hemos pasado tanto tiempo aquí. ¿No vas a salir? —Xun respondió mientras miraba a Long Chen.

—Ya que aprendí la ley y pasé esta prueba. ¿Cuándo podré salir de esta tierra? —Long Chen preguntó con curiosidad.

—Saldrás de este mundo tres días después de que formes una semilla de ley. Ya es de noche afuera. ¿Quieres ir a la casa del líder del clan y descansar o quedarte aquí para hablar toda la noche? —Xun dijo con una sonrisa traviesa.

—Ya que ya es de noche, puedo quedarme aquí y cultivar. Puedo ir allí por la mañana —Long Chen respondió.

—Pero antes de eso... siento que ha pasado una eternidad desde que lo hice —Long Chen dijo mientras miraba a Xun y lo sacaba frente a sus ojos.

—No puedo dejar a este pequeño hambriento —Long Chen dijo sonriendo mientras comenzaba a alimentar con su Qi al huevo que sacó de su anillo. Después de terminar, Long Chen devolvió el huevo y comenzó su cultivo.

Ocho horas pasaron. Long Chen ya estaba en el pico del reino del núcleo dorado de 4º etapa antes y después del cultivo nocturno, ya había superado la 5ª etapa del reino del núcleo dorado y se estaba acercando al pico de la 6ª etapa del reino del núcleo dorado. Continuó adelante y rompió hasta el nivel inicial de la sexta etapa del reino del núcleo dorado antes de detenerse en su cultivo.

—Voy a extrañar este mundo y esta velocidad de cultivo superrápida que tengo aquí —Long Chen dijo con una ligera sonrisa.

—Ooh... No creo que lo hagas —Xun dijo con una expresión misteriosa en su rostro.

—¿Puedo aprender otra ley en los próximos dos días? La ley del hielo es bastante buena —Long Chen dijo.

—Puedes intentarlo —Xun dijo mientras sonreía.

—¿Hmm? ¿Dónde está ese orbe? —Long Chen dijo, sorprendido al mirar por todo el cuarto, sin encontrar el orbe de la ley del hielo. Incluso miró dentro de su anillo, pero no encontró el orbe de la ley del hielo dentro.

—Olvídate de eso, ¿por qué no vas y pruebas la ley de la madera? —Xun se rió mientras decía.

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Long Chen se dirigió apresuradamente hacia el orbe de la ley de la madera que estaba colocado en el centro del salón con una expresión dudosa e intentó recogerlo, pero sus manos pasaron directamente a través del orbe como si fuera ilusorio.

—¿Por qué no me lo dices directamente? —dijo Long Chen a la aún sonriente Xun con una expresión molesta.

—Está bien, está bien, te lo diré. Puedes aprender una ley en este mundo para pasar la prueba, pero ese es el límite. Ya que has pasado la prueba, no puedes acceder a ningún otro orbe. Si deseas desesperadamente aprender la ley del hielo del orbe, tendrás que encontrarlo en el mundo real —explicó Xun.

—Entiendo lo que está pasando con el orbe de la ley de la madera, pero ¿qué pasa con el de la ley del hielo? ¿Cómo es que desapareció? —inquirió Long Chen.

—No desapareció. Regresó a su posición original ya que ya aprendiste una ley. Volvió al lugar de donde lo recogiste. Imagino que fue al templo de la tribu banshee —explicó Xun.

—Huh, tantas restricciones innecesarias. Qué decepción. Ya que nuestro trabajo aquí ha terminado. Vamos afuera —dijo Long Chen mientras caminaba hacia la salida.

Long Chen abrió las puertas y vio a los guardias sentados a cierta distancia del templo, luciendo exhaustos. Algunos de ellos notaron la puerta abierta y a Long Chen saliendo. Inmediatamente se levantaron al correr hacia él como lobos hambrientos que habían visto a su presa. Long Chen observó cómo todo sucedía con una expresión confusa.

—Gran... Gran Maestro Chen...! Finalmente, estás fuera —dijeron los guardias respirando pesadamente con una voz ácida.

—¿Qué les pasó a todos ustedes? ¿Por qué se ven tan cansados y su voz... han estado gritando todo el día? —preguntó Long Chen con una mirada confundida.

—No todo el día, solo desde los últimos días, cambiamos turnos gritando —dijo uno de los guardias.

—¿Por qué? —inquirió Long Chen.

—Gran maestro Chen. Estábamos gritando para llamarte porque no podíamos ingresar al templo debido a la barrera. Necesitas urgentemente ir a la residencia del líder de la tribu. Es muy urgente —dijo el líder de los guardias.

—¿Qué barrera? —preguntó Long Chen mientras miraba alrededor.

—Eso... ¿dónde se fue? —Los guardias miraron alrededor sorprendidos al notar que ya habían pasado el lugar donde la barrera los detenía, todos estaban parados frente a la puerta.

—Eso... Estaba justo allí... antes —señalaron en blanco los guardias.

—Olvídate de la barrera. Ya preparamos tu caballo aquí para que puedas llegar lo antes posible —dijo el líder de los guardias mientras informaba a Long Chen.

Long Chen rápidamente montó el caballo mientras este empezaba rápidamente a moverse hacia la residencia de Tensha. En poco tiempo, Long Chen llegó a la residencia del líder de la tribu de la tribu Elphia. Bajó del caballo y llamó a la puerta. Tan pronto como la puerta fue abierta, sin esperar, entró.

—¿Dónde está el líder de la tribu, Tensha? —preguntó Long Chen al anciano que abrió la puerta.

—El maestro fue a la guerra con el ejército. Te llevaré al joven maestro ya que él te puede informar más. Está dentro —dijo el anciano mientras escoltaba a Long Chen, quien seguía pensando en las palabras que el anciano había dicho sobre la guerra. Pensaba que obtendría respuestas adecuadas solo de Terra.