—Lin Lin salió corriendo solo para ver que Su Han ya había abierto la puerta de cristal —¡Bang! Un disparo atravesó el aire, resonando con un estruendo ensordecedor. Lin Lin sintió su cabeza zumbando, como si ya hubiera presenciado a Su Han siendo lanzado por el aire por una bala, ¡la sangre salpicando por todas partes!
Estaba atónita, pensando para sí misma: «Oh no, esto es un problema. ¿Cómo voy a explicarle esto a Qiao Yushan ahora?»
—Lin Lin se quedó allí parada en un trance, pero de repente se dio cuenta de que todo a su alrededor estaba espeluznantemente silencioso, sin un sonido que se escuchara. Miró hacia arriba asombrada y vio que los pasos de Su Han no se habían detenido. Seguía avanzando hacia el interior, como si el disparo hubiera sido una ilusión.