¿Amara expuesta?

Después de salir de la sala disciplinaria, Max regresó a su habitación, donde Anna y Amara lo estaban esperando.

—¿Todo listo? —preguntó.

—Sí. Vamos. —Anna asintió.

Max la miró sorprendido porque ella no preguntó por qué quería dejar la academia, etc. Sin embargo, un momento después, se dio cuenta de que Amara debía haberle explicado la razón.

Le dio a Amara una inclinación de cabeza, lo que hizo que la chica sonriera. Luego los condujo hacia el área de transporte.

Cuando llegaron al área de transporte, los tres hombres que habían intentado detener a Max en la sala disciplinaria los bloquearon.

—¿Realmente no valoras tu vida, verdad? —Una fría luz brilló en los ojos de Max mientras los miraba.

Los tres temblaron bajo su mirada, entonces uno de ellos se apresuró a decir, —N-No queremos p-pelear contigo. Sin embargo, no se te permite usar águilas de transporte.

Whoosh!

—¿Y si insisto? —Max dio un paso adelante, liberando su aura que aún no podía controlar adecuadamente.