—Y no tenemos mucho tiempo. El portal se abrirá completamente en media hora, creo —respondió Variante, frunciendo el ceño—. Prepárense para la batalla de sus vidas.
—A-ah, c-chicos. Ya era imposible romper las piedras. Así que la apertura del portal era inevitable. Creo que no deberíamos pelear entre nosotros. Necesitamos estar unidos —expresó también el hombre corpulento.
—No, espera, ¡mira el portal! Zale tenía razón al lanzar esa piedra, creo —dijo Clarisse de repente mientras señalaba hacia el portal.
Todos miraron el portal y lo observaron, para notar que algo era diferente.
—Tienes razón. El portal ahora se está abriendo incluso más lento. ¿Por qué? —comentó Zeiss.
—Ya entiendo. Ese es el secreto —respondió Variante de repente mientras sus ojos brillaban—. Zale en realidad hizo lo correcto.
—Todavía no entiendo. ¿Qué estás diciendo? —preguntó el hombre corpulento, frunciendo el ceño.