Capítulo 280: Espía

Lucifer estaba asombrado al descubrir que Ayn no estaba aquí. No podía evitar preguntarse si se había escapado, lo que lo llevó a decidir revisar el baño.

Cuando abrió la puerta del baño, finalmente se tranquilizó al ver a Ayn.

Ayn estaba de pie en el baño, con un conjunto de ropa diferente. Su cabello aún estaba mojado, como si acabara de terminar de ducharse recientemente.

—¿Hmm? ¿Qué pasó? —preguntó Ayn, sorprendida.

—Nada. Tu cena está aquí. Estará en la mesa. Come —dijo Lucifer con calma mientras se retiraba.

—Puedes colocar eso en la mesa e irte —le dijo a la criada, quien estaba esperando sus instrucciones.

La criada hizo lo que le dijeron y se fue. Siguiéndola, Lucifer también se marchó, cerrando la puerta con llave.

...

Un nuevo día llegó, y Lucifer despertó de su sueño. No había dormido en su habitación anoche. Era consciente de que Ayn no se había marchado, así que no sintió la necesidad de vigilarla. En su lugar, volvió a dormir en el sofá.