Capítulo 387: Dejándolo ir

—N-no. No hay tercera opción. ¡Voy a elegir! —exclamó Adam, sorprendido. La explicación sonaba más aterradora.

«Si elijo una de las dos botellas, al menos tengo un cincuenta por ciento de probabilidad de sobrevivir si tengo suerte. Pero si no elijo, me lanzará del edificio. Eso es una muerte segura desde esta altura. No puedo correr ese riesgo. ¿Pero cuál debo elegir?»

Miró cada una de las botellas, preguntándose cuál seleccionar. Ambas botellas parecían iguales. Y no eran botellas transparentes. No podía ver el color del líquido dentro de ellas.

No podía hacer una suposición informada. Sólo podía decidir a ciegas.

—Sólo te quedan treinta segundos. Elige rápido —le recordó Lucifer al hombre, mirando el reloj de pared.

—Diez segundos.

—Seis segundos.

Adam comenzó a sudar mientras Lucifer iniciaba la cuenta regresiva. Todavía no sabía cuál elegir.

—Dos segundos.

—Elijo la de la derecha —expresó en el último momento su elección.