Lucifer recordó una famosa historia de su tiempo, que le contaba su madre cuando era niño.
Ella solía repetir esa historia de vez en cuando. Según ella, era una historia inventada que alguien había creado antes de que el mundo conociera a los Moradores de Mazmorras.
—Yo... yo soy un Pegaso —explicó Lucifer.
En la historia, Pegaso era el nombre de un Caballo Alado que luchó contra los demonios para salvar a los humanos de la extinción. También era la única bestia mítica que conocía, y esperaba que fuera desconocida en este mundo.
—¿Pegaso? —Hun se detuvo en seco mientras miraba a Lucifer, frunciendo el ceño.
Al ver su ceño fruncido, Lucifer se preguntó si algo andaba mal. ¿Conocía este nombre?
—No recuerdo haber escuchado ese nombre antes. Ni siquiera está en nuestros libros. Debes venir de aún más lejos de lo que pensaba. De todos modos, ¿puedes tomar tu forma real para que lo pueda ver? Tengo mucha curiosidad por saber cómo luce un Pegaso —dijo Hun.