Las reglas para el campo de batalla nacional eran simples. En una isla abandonada, habría pequeños asentamientos abandonados por todo el mapa. Los jugadores debían lanzarse usando paracaídas a cualquier localización en el mapa.
Los jugadores no tendrían ningún equipo consigo, y debían saquear equipo ya sea de enemigos muertos o dentro de los asentamientos abandonados.
Habría una zona segura que se reduciría cada dos minutos y medio por un porcentaje fijo. Y en general el juego entero duraría como máximo 1 hora, donde la zona segura se encogería hasta cero.
Con cada contracción consecutiva de la zona, el daño recibido fuera de ella aumentaría. Y como no se permitían objetos en el juego, los objetos de curación también debían ser encontrados y saqueados en el mapa.
El evento no era solo sobre pelear y matar oponentes, sino sobre estrategia y supervivencia. Uno podía matar a un oponente, o simplemente decidir conservar fuerzas en la fase inicial, y enfrentarse en la fase final.