—¿Cómo va el progreso de la recolección de almas que murieron en el campo de batalla?
—Todo está procediendo sin problemas, Señor. Es bastante lamentable que no hayamos cumplido nuestra meta de construir los altares necesarios, pero eso se puede compensar aumentando el número de almas que recolectamos de la guerra en curso —respondió un hombre.
El hombre que se sentaba en el trono asintió con la cabeza.
—¿Qué hay de la llave? ¿Tenemos alguna noticia?
—Los agentes que actualmente están monitoreando a los dos príncipes dicen que ambos están haciendo lo mejor que pueden para adquirir la llave —informó un hombre vestido con una túnica negra.
—Lamentablemente, la sincronización de la guerra ha causado retrasos porque el Rey siempre está con su consejo de guerra. No ha habido oportunidades para ellos de preguntar, o buscar la llave sin que parezca sospechoso.