William tenía un mal presentimiento muy fuerte, ya que todos sus sentidos le gritaban que la muerte se acercaba rápidamente.
Agarró con firmeza la vara dorada en su mano mientras apretaba los dientes. Puesto que su oponente ahora se había tornado serio, era hora de que él también se pusiera serio.
—Arte de Guerra de Disparo Rápido... Forma de Fusión —William gritó internamente mientras apuntaba con la punta de su lanza—. Cañón de Carril Blitzer.
—Haz que el mundo tiemble en tu presencia —rugió Lugh—. ¡Aniquila toda oposición, Assal!
Los dos poderosos ataques se activaron al mismo tiempo.
El ataque de William viajaba a la velocidad del sonido.
El otro, a la velocidad del rayo.