Los sonidos de las armas chocando resonaban dentro de la amplia caverna mientras Elfos, Humanos, Duendes, Bestias, y miembros de la Raza de Minotauros, luchaban con un abandono salvaje. Las puertas de teletransporte de los Elfos fueron construidas profundamente bajo tierra, protegidas por varias capas de encantamiento. Estos encantamientos deberían haber sido suficientes para evitar que los Luchadores de la Libertad irrumpieran. Sin embargo, estas sólidas defensas se rompieron ante…
—¡Estoy rodando!