Rumores De Violencia
—¿Qué estás haciendo aquí?
Una voz femenina preguntó, sacándolo de su ensimismamiento.
Gustav se giró hacia la derecha.
A tres columnas a la derecha, una dama de cabello negro, vestida con un ajustado vestido rosa, se acercaba hacia él. Llevaba un monóculo en su ojo derecho. Parecía estar en sus veinte años, solo un poco mayor que la señorita Aimee. La diferencia era que estaba casada y no era tan hermosa.
—¡Nunca te he visto aquí antes! ¿Quién te dejó entrar? —preguntó la mujer con una mirada de desdén.
Sorprendentemente, no reconoció el rostro de Gustav. Esto se debía a que ella era la Bibliotecaria de la Biblioteca D, la señora Poturie. Ella pasaba todo el tiempo en la biblioteca.
—La señorita Aimee me pidió que devolviera esto —Gustav levantó el libro mientras respondía.
—¿La señorita Aimee te envió? —preguntó la señora Poturie mientras examinaba a Gustav de arriba abajo con una expresión de incredulidad.
Gustav asintió en afirmación.
—Déjame ver eso —dijo y tomó el libro de manos de Gustav.
—Sí, ella sí tomó este libro prestado —dijo la señora Poturie después de revisar el libro.
Ella bajó el libro y notó que Gustav ya no estaba frente a ella.
Él ya había caminado más adelante y estaba revisando una estantería frente a él.
—Sí, ¿por qué sigues aquí? —volvió a preguntar la señora Poturie con otra mirada de desprecio.
—¡Has terminado tu recado, ahora puedes irte! —declaró mientras caminaba hacia Gustav.
Gustav, quien estaba revisando los libros en la estantería frente a él con una mirada seria, ni siquiera se molestó en responder.
«Hmm... no aquí... no allá...» Los ojos de Gustav recorrían la estantería mientras sus dedos se movían rápidamente, adelantando libros y empujándolos de nuevo cuando descubría que no eran lo que estaba buscando.
—Oye, ¿hiciste... —la señora Poturie estaba a punto de decir algo cuando fue interrumpida por Gustav.
—¡Necesito el otro volumen de ese libro! —Gustav habló con una mirada urgente tras darse cuenta de que no podía revisar cada estantería aquí sin pasar horas.
Había más de mil estanterías y cada una podía contener más de mil libros, tanto gruesos como delgados.
—¡No está permitido que tomes ningún libro de aquí! —afirmó la señora Poturie con una mirada feroz.
Gustav retiró su mano de la estantería y se dio vuelta para mirar a la señora Poturie.
De repente, comenzó a caminar hacia ella. La señora Poturie tenía una expresión de desconcierto al verlo acercarse.
Para su sorpresa, Gustav pasó por su lado y siguió caminando.
Ella se dio vuelta para mirar su espalda mientras él avanzaba más lejos.
—Me aseguraré de decirle a la señorita Aimee que usted, señora Poturie, me detuvo de recuperar el libro que ella quería —dijo Gustav mientras seguía caminando.
Sus ojos se abrieron de par en par por el miedo después de que él dijera eso.
—Espera... —ella llamó a Gustav, haciendo que este se detuviera.
—Me disculpo por eso, por favor déjame conseguir el próximo volumen para ti —su tono de repente se volvió respetuoso.
Gustav, quien aún tenía la espalda hacia ella, sonrió.
—Funcionó.
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Treinta minutos después, los cielos comenzaban a oscurecer y Gustav ya estaba en camino a casa. De hecho, casi había llegado. Su tono de piel actual era marrón y el color de su cabello ahora era negro.
Sonrió mientras recordaba los eventos del día anterior.
La bibliotecaria le había dado no solo el siguiente volumen del libro, sino el resto de los volúmenes que venían después.
Había cinco volúmenes en total. Ya había leído el primer volumen, así que le dieron los otros cuatro volúmenes que estaban actualmente colocados en el dispositivo de almacenamiento tecnológico que tomó de Hung Jo.
«¿Hmm? Esto demuestra que algunas de las cosas que escuché sobre la señorita Aimee podrían ser ciertas», pensó Gustav mientras recordaba los rumores que siempre circulaban sobre la señorita Aimee.
Muchos estudiantes decían que odiaba a los mestizos. También escuchó un rumor sobre cómo estuvo antes en el MBO y luego decidió irse por su propia voluntad, lo que le hizo preguntarse por qué alguna vez pensaría en irse.
También escuchó sobre una ocasión en la que la señorita Aimee llegó a la escuela vestida con ropa casual. No fue reconocida debido a eso, y el guardia de seguridad intentó detener su entrada. No terminó bien para él, ya que se dice que terminó en el hospital con lesiones graves. También se decía que golpeó a la bibliotecaria, la señora Poturie. La señora Poturie la llamó mestiza vulgar y vil.
Debido a que ambas eran mestizas y tenían el orgullo que venía con serlo, surgió una pelea. La señora Poturie terminó siendo el objetivo de las furiosas arremetidas de la señorita Aimee. La señorita Aimee pateó, abofeteó y golpeó a la señora Poturie hasta el cansancio.
Los rumores decían que la señora Poturie no pudo tocar ni un cabello de la señorita Aimee, a pesar de que se decía que la señora Poturie poseía un linaje de grado B y pertenecía a una familia rica.
La señorita Aimee era del tipo que no le importaba ningún trasfondo; lidiaría con cualquiera que se atreviera a causarle problemas. Siempre se salía con la suya, ya que tenía la fuerza para respaldarlo.
«El miedo en el rostro de la señora Poturie era real... debería usar esto en mi beneficio, pero también tengo que asegurarme de que la señorita Aimee no se entere», Gustav llegó a esta conclusión mientras finalmente llegaba a casa.
«¿Hmm? De nuevo nadie está alrededor», Gustav notó que la casa estaba vacía una vez más.
Entró en su habitación y se sentó en el borde de su bañera.
—¡Abrir interfaz del sistema! —Gustav llamó.
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[Atributos del Anfitrión] [Habilidades y Capacidades] [Líneas de Sangre] [Misiones] [Tienda]
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El panel rojo apareció en su línea de visión.
Gustav lo observó por un momento.
—Me pregunto qué nivel tengo que alcanzar antes de poder acceder a la tienda... no puedo esperar a ver qué tiene para ofrecer esta función de tienda —comentó Gustav con una expresión de anticipación.
La primera vez que intentó acceder a la tienda, apareció una notificación.
[El huésped no ha alcanzado el nivel requerido para acceder a la tienda]
Cada vez que subía de nivel, siempre intentaba acceder a ella.
—Atributos del anfitrión —llamó Gustav.
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[Atributos del Anfitrión]
—Nombre: Gustav Oslov
—Nivel: 4
—Clase: ?
—Exp: 250/9500
—Puntos de vida (Hp): 170/170
—Energía: 40/80
{Atributos}
»Fuerza - 23
»Percepción - 21
»Agilidad - 20
»Velocidad - 22
»Valentía - 19
»Inteligencia - 22
»Encanto - null
{Puntos de atributos - 0}
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Han pasado tres semanas desde que Gustav comenzó su castigo, y él diría que estaba yendo bastante bien.
Lo que Gustav no sabía era que su fuerza ahora era más alta que la de un mestizo promedio de rango Zulu, aunque aún no era mestizo de rango Zulu.
Su inteligencia ya había superado la de sus compañeros y adultos normales. Ahora era comparable a la de los científicos.
Él podía analizar y recordar cosas con facilidad. Su capacidad de pensamiento era tan rápida ahora que incluso en clases normales respondía preguntas técnicas de ciencia en segundos. El profesor de ciencias siempre lo miraba como si fuera un monstruo y suspiraba, «Si tan solo fuera un mestizo de alta calidad».
Incluso antes de que Gustav pudiera aumentar su inteligencia con el sistema, el profesor de ciencias siempre lo tenía bajo observación, pero al igual que el resto, siempre tenía que ignorar los logros de Gustav debido a su línea de sangre de bajo grado.
—Gustav había completado la tarea de hoy y también distribuyó los puntos de atributos en la escuela.
En este momento quería revisar su progreso con la misión que recibió el día que comenzó su castigo.
Cerró el panel de atributos y abrió el panel de misiones.
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[Misiones]
»Diarias
»Semanales
»Mensuales
»Anuales
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Después de que el panel de misiones apareció en su línea de visión, llamó:
—Mensuales.
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[Misión de un mes]
[Cambia tu color de cabello y tono de piel cada vez que salgas de tu hogar y cuando estés fuera de las instalaciones escolares]
{Duración - 15/30 días}
{Recompensas}
»1000 exp
»15 puntos de atributos
»Mejora de línea de sangre
»Desbloqueo de habilidad aleatoria
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Gustav observó la tasa de finalización de la misión.
—Quince días más, hmm —Gustav seguía asombrado por la misión única que le obligaba a usar la habilidad de morfosis cada vez que salía de casa y la escuela.
Siempre que estaba fuera de la escuela, no sería reconocido por ninguno de sus compañeros que lo vieran debido a esto.
Sentía que tal vez el sistema estaba tratando de hacer que entrenara su habilidad de morfosis porque notó que la habilidad de morfosis podía subir de nivel sin la entrada del sistema.
Creía que probablemente era porque estaba ligada a su línea de sangre y no a una de las habilidades del sistema.
Gustav decidió cerrar la interfaz del sistema y sacó los cuatro libros que había obtenido de la biblioteca.
Los sostuvo juntos, uno encima del otro.
Todos tenían cubiertas rojas, como el primer volumen, pero la diferencia eran los años colocados en cada portada.
—¡Historia de los años 2077 - 2087!
—¡Historia de los años 2088 - 2098!
—¡Historia de los años 2099 - 2109!
—¡Historia de los años 2110 - 2120!
Gustav leyó los caracteres en cada portada con una mirada contemplativa.
—Parece que no voy a dormir esta noche —exclamó Gustav mientras colocaba tres de los cuatro libros en su bañera y sostenía el último.
—¡Historia de los años 2077 - 2087!