Ganando Tiempo

El agradable aroma flotó en sus fosas nasales, haciendo que sus estómagos gruñeran anticipadamente.

—¿Por qué no están comiendo? —preguntó Gustav mientras se sentaba.

—Ellos están... ¿Verdad chicos? —preguntó E.E con una mirada fulminante.

—De ninguna manera, tú puedes tener el mío, Falco —Teemee pasó su plato y se movió hacia la posición de Gustav.

—Jeje —una sonrisa irónica apareció en su rostro antes de que Falco Oscuro tomara el control—. ¿Te atreves a intentar envenenar a este señor? ¡Saca esta mierda de perro de mi vista, poste ciego! —expresó y lo pasó a Aldris.

—Este señor tendrá la comida que se ajusta a sus gustos —Falco Oscuro dijo mientras se levantaba y se movía hacia Gustav.

Aldris tenía tres platos frente a él en ese momento. E.E lo miró con una mirada llena de intención—. Aldris... El desperdicio no es...

Antes de que pudiera completar su oración, Aldris expresó: