Ritual

Emery estaba removiendo la nueva mezcla alquímica dentro del caldero que Abuelita acababa de idear mientras Lanzo estaba parado al lado contando las hierbas en una cesta antes de salir a buscar más de ellas. Abuelita le sonrió cálidamente pero cuando él miró y vio el reflejo de Abuelita en el contenido del caldero, la cara de la amable anciana fue reemplazada por la de una mujer de cabello blanco grasiento con una cara llena de forúnculos y arrugas, y con ojos que parecían a punto de salirse de sus órbitas. Giró su cuello hacia ella y era, en efecto, la vieja bruja de pesadilla. Un humo negro emergió de su mano y la Abuelita comenzó a reírse con una sonrisa maligna. Entonces Emery despertó de un sobresalto, de nuevo a la realidad.