Después de juntar sus manos y agradecer al joven frente a él, Shun Long se alejó del Mostrador de Misiones mientras esperaba a que Liu Mei y el resto registraran las misiones que querían tomar. Aunque cada discípulo en la secta podía elegir cualquier nivel de misión que quisieran independientemente de su estatus o nivel de cultivo, incluso los discípulos internos no podían evitar el proceso de registrar qué misiones querían aceptar. Afortunadamente, su espera no fue demasiado larga, ya que en apenas un par de minutos, todos los demás también habían registrado sus misiones antes de dirigir su atención hacia él. En ese momento, la expresión de Shun Long se volvió seria y dijo con voz solemne:
—Recuerden, que no importa lo que suceda, siempre pongan su seguridad por encima de todo mientras estén solos.