La habitación detrás de la puerta estaba llena de nada más que oscuridad, sin un mueble o cualquier otra cosa a la vista.
Después de un momento de deliberación, Shun Long dio un paso hacia adelante y entró un momento después.
Sin embargo, en el momento en que puso un pie dentro de la habitación, Shun Long escuchó otro fuerte sonido de estruendo viniendo desde detrás de él, mientras la pesada puerta de la habitación se cerraba automáticamente por sí misma, bloqueando la poca luz que intentaba entrar en la habitación desde afuera.
Dentro de la oscuridad que ahora había llenado casi completamente la habitación, Shun Long no podía siquiera ver sus propios dedos.
Solo había una luz muy tenue que provenía de la propia puerta, la cual Shun Long asumió que era gracias a sus 5.000 Piedras Espirituales de grado medio.
Por supuesto, incluso si no podía ver nada usando sus ojos, sabía que aún podía usar su sentido del alma para percibir su entorno.