No podrías soportar dejarme morir

—¿Por qué hiciste eso? —preguntó Yao Ran.

—¿Qué?—preguntó Long Yu.

—¿Por qué usaste tu cuerpo para protegerme? Si la explosión hubiera sido más fuerte, podrías haber muerto —interrogó de nuevo Yao Ran.

—Mi cuerpo reacciona más rápido que mi mente —respondió Long Yu.

—Long Yu, no necesito la protección de nadie. Puedo protegerme. Solo tienes una vida. Deberías valorarla —dijo Yao Ran con tristeza.

—Ran Ran, sé que no necesitas mi protección, y no lo hice por ti. Todo lo que hice por ti fue por mí mismo —afirmó Long Yu mientras sostenía sus suaves manos más fuertemente.

—Te protegí porque yo quise. No necesito tus gracias, ni tu recompensa. Todo lo que quiero es que vivas de manera segura, feliz y pacífica —explicó Long Yu.