0274 Con mil poses y cien expresiones, ella es verdaderamente única en su especie.

Lin Siya miró a Su Ran con desprecio, su tono rebosante de sarcasmo.

—¿Qué importa si ha nacido de la esposa legítima? Es maliciosa y carece de cualquier atisbo de bondad.

Lin Siya dirigió la conversación en la peor dirección, haciendo una sola mención sobre la reticencia a contribuir a la caridad. Si los medios se enteraban de esto, la reputación de Su Ran quedaría arruinada de por vida.

La mirada de Fu Qiyuan permanecía baja, mostrándose completamente indiferente al enfrentamiento, pero un destello de luz fría parpadeaba en lo profundo de sus ojos.

Su Ran tomó una profunda respiración, sintiéndose algo desamparada.

—Parece que no tengo más opción que tocar una melodía esta noche.

Lin Siya resopló y no dijo nada, volviendo a sentarse en su silla.

Su Ran se levantó lentamente, y en ese momento, Su Xinyan regresó a su asiento.