Después de saludar a un cliente, la Recepcionista A levantó una dulce sonrisa, —Directora Lu, ¡hola!
—Directora Lu, ¡hola! —la Recepcionista B también intervino, mostrando su sonrisa más hermosa, intentando causar una buena impresión en la joven Directora Lu.
Lo que ellas no sabían era que la Directora Lu Xue Zhen no les prestaba atención, sino que caminaba directamente hacia Qin Qin, lo que las tomó a ambas por sorpresa.
Esto… ¿por qué la Directora Lu se dirigió a esa chica?
Las dos recepcionistas se miraron conmocionadas, el pánico visible en sus ojos.
—Qin Qin, ¿a qué vienes? ¿Por qué no me llamaste? —Xuezhen levantó su sonrisa, algo sorprendida.
—Quería sorprenderte, pero quién iba a pensar que venir aquí sería todo un shock y nada de alegría —Qin Qin sonrió levemente.
La mirada de Qin Qin barrió a las dos recepcionistas, quienes sintieron un escalofrío recorrer su espinazo y empezaron a sudar de las palmas.