Un Arma Diferente

Después de que Sima You Yue cerró la puerta, escuchó a Pequeño Rugido gritándole desde dentro de la Perla Espiritual, alborotándose para salir. Con un pensamiento, Pequeño Rugido apareció frente a ella.

—¿Qué ocurre? —Lo abrazó y desordenó sus peludas orejas largas y preguntó con suavidad.

—Yue Yue, ¿realmente quieres desafiar a esa flor de loto blanca? —preguntó Pequeño Rugido.

—Sí, ¿por qué no? Como la gente vino especialmente a provocarme, ¿me dices, puedo retroceder?

Sima You Yue lanzó a Pequeño Rugido al aire y él saltó formando un hermoso arco creciente y cuando vio que iba a chocar contra la pared, rápidamente torció su cuerpo y voló de vuelta para verla buscando algo dentro de su anillo espacial. —¿Qué buscas?

—¡Armas! Necesito encontrar un arma para este desafío. En el anillo que ese tacaño de papá me dejó solo había una patética selección de armas —dijo ella.

—¿Quieres armas? ¡Vi muchas en el lugar de los Pequeños Espíritus! —informó Pequeño Rugido.

—Oh, ¿en serio? ¡Entonces vamos a ver! —Con un pensamiento, ambos entraron de nuevo en la Perla Espiritual.

Tan pronto como entraron, Pequeño Espíritu apareció ante ellos. —Ven conmigo —dijo con calma mientras se giraba y guiaba el camino. Parecía que sabía la razón de su llegada.

—Esta es la colección de refinamiento de armas del antiguo antiguo Maestro —. Pequeño Espíritu los trajo a una habitación llena de una amplia variedad de armas.

—¿Cuántos antiguos maestros tuviste? —Después de escuchar las palabras de Pequeño Espíritu, no pudo contener su curiosidad y preguntó.

—Solo esos pocos —. Pequeño Espíritu desapareció justo después.

Sima You Yue echó un buen vistazo a las armas y descubrió que la mayoría consistía en Armamentos Sagrados. Esparcidos por la pared había armas todas grandiosas y majestuosas, sin embargo, buscar un arma de bajo perfil e inadvertida era bastante difícil.

Después de revisar casi todas las armas, finalmente encontró un pequeño puñal en la esquina más lejana de la habitación. Lo recogió y lo dio vuelta en su mano y sintió el peso y finalmente dijo:

—Listo, será este.

Después de que Sima You Yue dejó la habitación, Pequeño Espíritu apareció y echó un vistazo y cuando vio el lugar vacío en la esquina lejana de la habitación donde antes estaba el puñal, se sorprendió. —En realidad eligió ese arma y no se resistió. Pensar que todos los anteriores Maestros no lograron obtener su reconocimiento, sin embargo, una chica que acaba de comenzar el camino de la cultivación logró obtener su aprobación...

¿O podría ser que su futuro sería un camino largo y arduo plagado de obstáculos?

Cuando Sima You Yue sacó el puñal y lo retiró de la vaina, se quedó atónita.

—Jajaja.

Pequeño Rugido se estaba riendo histéricamente tumbado en el suelo, sujetándose el estómago y secándose una lágrima.

—Yue Yue, elegiste durante tanto tiempo y al final, de todas las finas armas que había allí, ¿realmente escogiste un puñal oxidado?! —Sima You Yue miró impotente el puñal en sus manos. Aunque se sentía bien en sus manos pero cuando lo desenvainó, aparte del mango que estaba envuelto en cuero, toda la hoja estaba cubierta por una capa de óxido. ¿Cómo iba a usar esto para el desafío?

En ese momento, un estudiante masculino corrió hacia su patio y gritó:

—¡Sima You Yue! La señorita Meng me ha pedido que te recuerde que el desafío está por comenzar pronto, si no vas a participar, ¡será mejor que empieces a empacar tus cosas y te largues!

Después de decir lo que necesitaba, se dio la vuelta y se fue. Aunque Meng Ting no temía a su Abuelo, eso no significaba que los demás sintieran lo mismo; si fueran atrapados por Sima You Yue, su futuro sería sombrío.

Cuando Sima You Yue oyó el mensaje, suspiró y dijo:

—Ahora ni siquiera tengo tiempo para pulirlo, usaremos lo que tenemos entonces. Aunque no se ve bien, aún se ajusta bien en mis manos.

Pequeño Rugido le lanzó una mirada de desdén:

—¿Cualquier otro arma sería mejor que eso?

—¿Qué sabes tú? Un arma y una persona deben resonar, si simplemente elijo cualquier arma, en un momento crítico, podría arrastrarme hacia abajo. —Murmuró y envainó el puñal y continuó argumentando en defensa:

— Además, para algunas armas, en manos de diferentes personas, se puede desatar un poder diferente.

Parpadeó por un momento mientras miraba el puñal. Por un momento, pensó que se movía por sí solo. Mmm, debe haber sido una ilusión.

—Bueno, eso dijiste la última vez también. Pero desde entonces, aún no has encontrado una arma con la que estés contenta. —Se quejó Pequeño Rugido.

Miró el puñal con desdén. En su vida pasada, nunca había encontrado un arma adecuada y siempre estaba buscando esa única arma. Ahora, en su vida presente, ¿cómo terminó con un arma tan destartalada?

Mirando la realidad ante él, su corazón se sentía helado.

Sima You Yue vio la expresión en Pequeño Rugido y sintió tres líneas negras en la parte posterior de su cabeza. ¿Qué era esa expresión? ¿Despreciaba su arma, o a ella? ¿Y qué pasa con la expresión abatida y la sensación de tristeza que estaba surgiendo dentro de ella?

—¿Quieres volver? —preguntó.

—¡No! Quiero quedarme afuera y verte destrozar a esa flor de loto blanca con mis propios ojos! ¡Hace tanto tiempo que no te veo! ¡No quiero volver! —Sacudió la cabeza vehementemente.

—Bien entonces, vamos —Ella aseguró el puñal con seguridad en su cinturón y llevó a Pequeño Rugido afuera.

Como todo el mundo sabe, ella no podía cultivar. No podía poner el puñal en el anillo espacial ahora. Todavía no.

Cuando escuchó abrir la puerta vecina, Bei Gong Tang echó un vistazo por su ventana y negó con la cabeza antes de continuar leyendo el libro en su mano.

—You Yue

Sima You Yue se detuvo en seco, acababa de salir del patio y escuchó a Wei Zi Qi llamar desde atrás.

—Zi Qi, ¿algo? —preguntó.

—Nada —Sacudió la cabeza—. Te acompañaré al escenario, no importa cuáles sean los resultados, es mejor que tengas a alguien que te acompañe allí.

Mientras caminaban hacia el escenario, atrajeron la atención de muchos ya que la gente comenzó a señalarlos y a hablar en susurros.

—Pensé que ya había sido expulsado, no creí que estuviera escondido entre los novatos.

—¿Quién crees que es su abuelo? Si quiere quedarse en la Academia, todo lo que necesitan es una palabra de él.

—Realmente sinvergüenza, este tipo de persona solo puede depender de su trasfondo, ¡es demasiado injusto!

—Escuché que Meng Ting lo desafió a una pelea, si pierde, tiene que dejar la Academia y nunca regresar.

—¡Deberían dejarlo ir rápido, si gente como él se queda, no haría más que empañar la reputación de nuestra estimada Academia Imperial!

—También escuché que si ganara, quería que Meng Ting lo evitara y se desviara si alguna vez se encontraban.

—Realmente sabe soñar. Escuché que el temperamento de la señorita Meng no es muy bueno, esta vez que la provocó, me pregunto cuán miserable será en el escenario más tarde.

—Esa Meng Ting ya ha alcanzado el nivel de una Guerrero del Espíritu de quinto grado a una edad temprana, aunque el nivel no es muy alto, es suficiente para lidiar con un inútil.

—¡Sí! ¡No puedo esperar a verlo salir por las puertas de la Academia!

.....

Sima You Yue y Wei Zi Qi pasaban caminando y esos susurros descuidados e insultos simplemente se lanzaban sin pensar, creyendo que ellos no podían escucharlos bien.

Sin embargo, cada palabra fue escuchada claramente y Wei Zi Qi se sonrojó de ira. Pero cuando vio que Sima You Yue caminaba tranquilamente como si no hubiera escuchado nada, Wei Zi Qi solo pudo contenerse y caminar a su lado.

—¿No estás enojada? —Wei Zi Qi preguntó entre dientes apretados.

—¿Por qué habría de estarlo? Los perros que muerden son los callados. Estos perros ladrones solo saben hacer ruido. ¡La mejor manera de callarlos es usando la fuerza para hablar!

—¿Escenario del desafío? Esto debe ser —Sima You Yue leyó en voz alta las palabras que colgaban en el letrero de arriba.

Antes de que incluso hubiera entrado, ya podía oír el ruido que salía de adentro.

¡Parece que Meng Ting había reunido a bastante gente para ver la batalla!