Bloqueando su camino hacia adelante

—¿Clan Nalan? —Jade frunció el ceño y dijo—. El Clan Nalan de todos modos no está aquí, solo estarías guardando las habitaciones. Dáselas primero a los Clanes Sima.

—De ninguna manera —dijo Li Mu—. Los Clanes de Nalan ya han llegado y estarán viniendo aquí hoy.

—¿No puedes sacar ni una sola habitación? —Jade se estaba enojando.

—Hermana, ya he confirmado todo con los Clanes de Nalan, no podría justificarme con ellos cuando llegue el momento —dijo Li Mu.

—Tú... está bien. Te dejaré este lugar. Los llevaré a otro sitio —Jade resopló.

—Hermana, son solo personas que te encontraste en el camino, ¿por qué deberías preocuparte por ellos? —dijo Li Mu insatisfactoriamente.

—Me ayudaron antes, así que dije que los llevaría a Ciudad Santa. ¿Cómo podría simplemente abandonarlos a mitad de camino? Ya que has dicho que quieres esperar al Clan Nalan aquí, iré con ellos —Jade se fue justo después de soltar estas palabras.

—¡Hermana discípula!