Li Hao se enfrentó solo a los numerosos Reyes Demonio en Liangzhou, rescatando a millones del peligro y matando a siete Reyes Demonio en sucesión. Como teniente general, debía ser conferido con el rango de Duque de segunda clase, un asunto que generó algo de debate.
Esto mostró cuán distinguida y grandiosa era esta conferral, marcándola como una de las más prestigiosas en cientos de años.
Todos quedaron impactados por la decisión y generosidad del Emperador Yu, dándose cuenta de que esto era realmente diferente. No se trataba meramente de la fortuna de una provincia; era realmente un asunto que cambiaría el destino de la nación.
Solo podía decirse que era bien merecido.
Por lo tanto, cuando las palabras del Emperador Yu cayeron, además de un breve silencio en el salón, hubo otra oleada de felicitaciones, sin oposición alguna.
—¡Rápido, ve y encuentra a Chong Er, que reclamen su recompensa! —El Emperador Yu dio la orden.