La siguiente tarea era crear suficientes dispositivos explosivos en forma de bola. Abel decidió llamar a estas cosas super bolas explosivas.
Abel lanzó otra de ellas y se apresuró a entrar en el portal.
Ocurrió otra enorme explosión, pero esta vez Abel no fue a mirar el resultado. Su tarea principal ahora era hacer super bolas explosivas para llenar el espacio de su almacén personal que acababa de vaciar.
Abel guardó cuidadosamente la otra mitad del meteorito que no había utilizado. Le dolía mucho el hecho de que estaba convirtiendo estos materiales de primera calidad en dispositivos explosivos de un solo uso. Pero aún así, su poder era innegable, así que Abel creía que valía la pena el sacrificio.
Estas delicadas super bolas explosivas no ocupaban mucho espacio en su almacén personal. Solo ocupaban 1 ranura, y había 48 ranuras. Abel decidió dividir la mitad de su meteorito en 12 piezas.