Cueva de la Séptima Estrella.
Las montañas temblaban y se balanceaban.
Los más afectados eran sin duda los retadores que aún estaban comprendiendo las estatuas de piedra.
Entre los numerosos retadores en la Cueva de la Séptima Estrella, solo tres o cinco eran Retadores del Patrón Dorado, y todos los demás eran de Patrón Plateado.
En cuanto a aquellos tres Examinadores del Patrón Rojo, ya habían pasado la prueba y dejado la Cueva de la Séptima Estrella hace varios días.
La mayoría de los Retadores del Patrón Dorado también se habían marchado.
—¿Qué está pasando? —preguntó un retador.
—¿Por qué siento como si el suelo estuviera inestable? —comentó otro.
—¿Un terremoto? ¿Pueden los mundos virtuales incluso tener terremotos? —dudaba un tercero.
...
Los retadores se miraban unos a otros, confundidos. Todos eran Evolucionadores de Tercer o Cuarto Rango, ninguno de ellos capaz de perder su equilibrio por tales temblores.
Pero, ¿qué lugar era este?