—Sí, es una pena, pero ya que Gran Abuelo y Bisabuela han venido buscando, definitivamente debemos ir a la Capital Imperial...
—Este lugar es bueno.
Si no fuera por estas enemistades, Gu Qiaoqiao quisiera quedarse tranquilamente en su ciudad natal, sin querer ir a ningún lado.
—Qiaoqiao, ¿necesitabas verme por algo? —Luo Fan se secó las manos con un pañuelo y se volvió a preguntar.
—Sí, hay algo —Gu Qiaoqiao asintió.
—¿Sobre Qianqian? —Luo Fan dijo directamente.
El siempre observador Luo Fan, ¿cómo no iba a notar que la mirada reflexiva de Gu Qiaoqiao se había fijado constantemente en él y en Qianqian?
Gu Qiaoqiao se sorprendió, no esperaba que Luo Fan fuera tan directo.
Simplemente dejó de dar rodeos—. ¿Qué piensas de mi hermana?
—Inteligente, sensata, ambiciosa, educada... —él sonrió y agregó—. Y también muy linda.
—¿No crees que mi hermana es muy inocente e inmadura?