Los otros estudiantes cayeron en silencio, mientras algunos asentían en acuerdo. —Ahora que lo mencionas, yo también recuerdo a Cuatro Clase —comentó uno.
Zhao Jia, sentada junto a Qin Churou, se burló. —Cuatro Clase es para lo peor de lo peor. Solo aquellos que carecen de sentido considerarían ir allí.
—Ya basta, deja de hablar —espetó Qin Churou, claramente irritada. El constante murmullo de Zhao Jia solo añadía a su ya mal humor.
Zhao Jia quedó en silencio, pero el disgusto en su rostro era inconfundible. Su expresión se oscureció mientras su desdén hervía internamente. «¿Qué tiene de especial Qin Churou? Innumerables personas son mucho más capaces que ella. Si yo tuviera su trasfondo familiar, sería cien veces mejor.»
Mientras tanto, varios estudiantes de Clase Uno se reunieron emocionados, discutiendo el reciente traslado de Lu Ming a Cuatro Clase. Sus voces se intensificaron, claramente despreocupados por su entorno.