No Es Nada Difícil

La experiencia que Roland obtuvo al aprender un hechizo de nivel dos superó su imaginación. Fue más evidencia de lo complicada que era la Competencia Lingüística.

Lanzándose Competencia Lingüística a sí mismo, Roland dejó la posada.

Gru le había dibujado un mapa sencillo que marcaba la dirección de Aldo. Aunque el mapa era bastante feo, Roland todavía pudo leerlo.

Siguiendo el mapa, Roland llegó a una mansión en el norte de la ciudad.

Rodeada de vallas de bronce, la mansión tenía un césped plano y verde, así como un pequeño edificio de paredes blancas y tejas rojas.

Dos guardias estaban de pie frente a la puerta. Roland se acercó a ellos y dijo:

—Me gustaría encontrarme con el Señor Aldo, como un Mago.

Los guardias lo habían visto y su túnica mágica, pero vacilaron. Uno de ellos dijo:

—Señor, si quiere encontrarse con nuestro maestro, por favor muestre su invitación, o algo que pueda probar su identidad.