—Roland sintió que Kaka tenía un punto.
—Distintos hombres sentían atracción por distintos tipos. Por ejemplo, a Roland le gustaban más las enfermeras, y a Schuck le gustaban las empresarias.
—Era perfectamente normal que a alguien le gustara la reina por su intimidante posición.
—Sin embargo, Roland sí sentía que era una cosa apreciarla, y otra muy distinta secuestrarla.
—Roland respondió las preguntas de Kaka respecto al hechizo derivado y descansó una noche en la mansión.
—Al día siguiente, Kaka continuó estudiando el hechizo derivado. A pesar de la guía de Roland, aún había varios nodos que no había comprendido completamente.
—Roland, por otra parte, salió.
—Al salir de la mansión, Roland giró la cabeza.
—Los jugadores no necesitaban dormir, pero se había impuesto un toque de queda en la capital desde que secuestraron a la reina. Cualquier persona que deambulara por las calles de noche sería interrogada e incluso encarcelada.