Presión

Sylas se puso inéditamente serio. Podía sentir el peligro que le erizaba la piel, pero ya había tomado una decisión en el volcán ese día.

Se dio la vuelta y saltó la pared usando su kunai. Sabía que esa noche estaba destinada a no ser corta.

Su mente ya estaba inundada de pensamientos, preguntándose si debería intentar llegar a la Ciudad de Lucio o no.

Estaba bastante lejos, y aunque estuviera al 100% y realmente desesperado, le llevaría más de media hora.

Teniendo en cuenta lo tranquilo que se mostraba aquel hombre, definitivamente estaba confiado en atrapar a Sylas mucho antes de eso. Y Sylas ya había sentido la sonda en su mente. Aunque no podía ni ver el Grado del hombre, era probable que todas sus estadísticas hubieran sido vistas, tal vez incluso en detalle.

Las únicas sorpresas que podría tener reservadas eran sus Habilidades y potencialmente su Locura. Realmente no tenía idea de si sería capaz de resistir.