—Sylas podía sentir prácticamente su cuerpo sanando, pero eso no era todo. Su Éter agotado también se estaba reponiendo, y como si todo eso no fuera suficiente, también se sentía más fuerte.
—Era como si acabara de ingerir una droga milagrosa capaz de hacer cualquier cosa. Pero el hecho subyacente de la cuestión era bastante simple.
—Esta Plantilla Permanente era capaz de tomar la esencia de una bestia y destilarla en una sola pastilla, manteniendo muchas de sus características más fuertes.
—Hm? —Sylas se dio cuenta de que algo estaba mal e inmediatamente comenzó a disipar el Éter que estaba acumulando. Este cambio atenuó un poco su estado de ánimo, pero también lo ayudó a despejar la niebla de placer que cubría su mente.
—El Éter que se estaba reponiendo justo ahora era de un atributo que no era compatible con su Éter Hielo-Veneno. Como tal, después de alcanzar un cierto umbral, en realidad comenzó a hacerlo sentir más incómodo que no.