—¡Conspiración! ¡Esto es una conspiración!
Su Nan miró el Ojo del Demonio de la Destrucción frente a él, su rostro sombrío.
La apariencia del Ojo del Demonio no era diferente de un ojo humano, la única diferencia era su color púrpura-marrón, y al observar cuidadosamente, se podía sentir el poder aterrador escondido dentro de él.
Nadie habría pensado que un ojo tan demoníaco sería la reliquia dejada por uno de los Nueve Grandes Dioses Demonios Primordiales, el Dios Demonio de la Destrucción.
En su previsión, podía fusionarse con el ojo demoníaco infundiéndole Qi Demoníaco, pero en realidad, tanto si lo infundía con Qi Demoníaco como si usaba el poder del linaje, ambos activarían el mecanismo de fusión del ojo demoníaco.
—No es de extrañar que el Dios Demonio de la Destrucción haya usado una técnica secreta para separar su talento en una forma física. ¡Parece que tenía la intención de resucitar algún día!