Antes del final de la subasta, Kent recibió una misión que no podía rechazar. De hecho, era una misión que se sintió obligado a aceptar, sin importar el peligro involucrado.
Incluso sin la misión, ya estaba preparado para enfrentarse al Murciélago Malvado con todo lo que tenía, ya que albergaba un profundo odio contra los cultivadores malignos.
Este sentimiento surgió cuando descubrió que el maestro de la secta de la Secta del Palacio Divino era un practicante del mal.
Esta revelación alimentó su determinación para enfrentarse al Murciélago Malvado, aunque sabía que simplemente hacerlo sangrar sería un logro significativo.
Sin embargo, la mayoría de su resolución provenía de la propia misión.
⟪Nombre de la Misión: La Misión de Exterminio⟫
⟪Tipo de Misión: Procesal (Tus recompensas se otorgan a medida que avanza la misión)⟫
⟪Dificultad de la Misión: Muy Difícil⟫
→ Toda leyenda comienza con algo incomprensible.