Esta Bella Noche Yo

La expresión de Ralph se congeló brevemente antes de exhalar y relajarse. —Tienes razón. Simplemente estaba demasiado ansioso porque los príncipes no son de fiar. No puedo creer que nos hayan ofrecido tal noticia sin pedir nada a cambio.

Soleia se detuvo. —Querían que visitara el palacio…

—Eso también es demasiado peligroso —Ralph sacudió la cabeza—. ¿Y si están aprovechando esta oportunidad para secuestrarte a Vramid?

—Entonces habrían tenido muchas oportunidades para hacerlo antes de hoy —reflexionó Soleia, sintiendo escalofríos en sus brazos al recordar lo rápido que la habían encontrado.

Los príncipes tuvieron que haber salido de Vramid después de ellos, pero aun así lograron descubrir su nueva residencia mientras estaban ocupados con asuntos de estado.

—Tengo que asumir que tenemos algo que ellos quieren, por lo que estarían dispuestos a dejarnos quedarnos en lugar de llevarnos de vuelta con mi padre.