Capitulo 3: Intermedio y encuentro

"¡Aquí Anne!... ¡Carajo!"

Ha pasado solo 1 semana, el día que llegué a mi trabajo todos se me quedaron mirando raro, creo que la mayoría o una buena parte no creían que volvería, la otra estaba aliviada y sabía por qué.

(Les cobré el doble)

Aunque debo decir que mi salario bajó un 5% y no tengo días de descanso hasta dentro de un año por lo que pasó, pero yo trato de sobrellevarlo y además que tendré que ahorrar más. Termine el día, hable con Jack sobre lo que pasó en el concierto.

—Debo decir que William lloro mientras tocaba, algunos les gusto porque pensaban que se lo tomaba en serio para ser su primera vez en un concierto, otros creían que se dejó llevar demasiado y otros pensaron que era por la presión de estar ahí— dijo Jack relatándome lo que pasó— después de eso yo me fui, aunque debo decir que note la mirada de los hermanos hacia mi mientras el camión de la banda pasaba en la carretera.

—Lo siento, casi arruino tu noche— me disculpé

Pero él me miró y sonrió algo dudoso.

—No, no te preocupes, aunque debo decir que no lo disfruté del todo, debo decir que saber las razones de casi su separación me hace dudar de seguirlos, pero de no ser por ti sería peor

Lo mire y lentamente suspire muy silenciosa, después de ello la semana se volvió normal, seguía trabajando como siempre... Hasta un día en específico, estaba descansando cerca del ocultamiento del sol por el horizonte.

Hay una mujer frente a mí, yo estoy almorzando un pequeño pedazo de pastel en un parque, está mujer viste demasiado formal, tanto que siento envidia de no vestirme así para trabajar, cabello negro, largo y sujetado por una liga en la nuca, lentes, mirada inquisitoria afilada, labios carnosos bien pintados y poco maquillaje en el rostro, un traje de tres piezas para mujer, medias negras cubriéndole las piernas hasta el corte de la falda que le cubre los muslos, zapatos de tacón, tenía en sus manos una libreta que sostenía con una y con la otra un lapicero... si podía decir algo, parecía ser de niveles superiores a mí en algún trabajo empresarial, fuese cual fuese. Hasta me hizo tragar saliva por lo bien que vestía y se veía... ¡maldita envidia!

—Con que eres tú— dijo con un tono fuerte y mandón

Yo me quede algo en blanco y no supe qué decir.

—Si... ¿soy yo?— fue lo único que se me ocurrió responder

Ella parecía no inmutarse por mi respuesta, se acomodó los lentes con la mano que sostenía el lapicero mientras cerraba los ojos.

—Tengo algo que pedirte—dijo al bajar la mano con un poco más de presión

Yo me quede peor que hoja en blanco, ni siquiera sabía de qué hablaba, o sobre qué hablaba.

—Antes de la pregunta... ¿Estamos en la misma sintonía o me estas confundiendo con alguien?

Ella se quedó mirando más a mí, como si midiera que soy, si un robot, una tonta o una humana, después de sentir su mirada relajarse, relajo los hombros y suspiro.

—Demasiadas preguntas, no, no la culpo, es bueno...— parecía murmurar ella misma frente a mi

Después de un poco de su propio chachareo tosió al darse cuenta de que lo hacía frente a mí y habló otra vez, no sin antes sacar algo de su bolsillo de su pecho derecho, era una tarjeta blanca y pequeña menor a lo que mide una tarjeta de crédito, leí su contenido mientras ella habló.

—Discúlpame, soy Janet Holsmit encargada de la administración de Desire Industries— dijo al ver que tome la nota— y vengo aquí por tus deseos...

Mi tren del pensamiento otra vez tuvo un accidente, ni siquiera mi cerebro en su estado libre tuvo tiempo de repararlo, tiré mi pastel al piso de impresión.

—Disculpa, creo que escuche mal, ¿podrías....

La mirada de ella aumentó su intensidad, yo me encogí de hombros por lo repentino.

—Tu eres "aparentemente" Anne Elizabeth Read, sé que estuviste en aquella fiesta con el señor Corvux, y también que el semi-dios del engaño Loki está contigo, ambos tienen la misión de recolectar los deseos de los afectados por ti y él al estar ebrios...

Mi cerebro se derritió y no pude hablar por momentos, ella era peor que la CIA... o era un agente de ahí que me había descubierto... dicen que esa agencia tiene de todo. Ella continuó mientras notaba mi shock repentino.

—Sí, es demasiado que yo sepa esto, pero es necesario, necesito los deseos que hayas recolectado, yo me ocuparé de ello— dijo mientras extendía la mano

Si de por sí el primer encuentro ya es una carrera, no sé qué hacer ahora, Mi voz se retiró de mi garganta tragándome mis palabras casi literalmente, pero trate de acelerar mi pensamiento lo más rápido que podía. Trate de pensar algo más, pero si ella dice que no está sola significa que alguien más está alrededor mío, correr sería un error tanto como pedir ayuda.

—Es la primera vez que veo a Anne de esta manera, debo decir que tengo que agradecer a alguien como tú el que haga eso— dijo una voz infantil en el espacio

Yo la reconocí, mire a Janet y logre ver que frunció el ceño y arrugó su frente un poco, parecía como si esa voz le molestara.

—Loki, Odín quiere de nuevo a Minus tanto como una parte de su cetro—dijo Janet— he venido de parte de él a tomar en mi poder y bajo mi jurisdicción los deseos que tanto tú como ella poseen

Entendía a lo que se refería, pero si ella hablaba de esa manera daba a entender que no era realmente una empresaria. Llegué a pensar que no era la única recolectando deseos o que Loki había buscado otra ayuda.

—Dices que es tu jurisdicción, pero vamos "Janet" aquí solo llevas ¿qué? ¿159 años? Mírate, aún conservas esa figura y porte para alguien de esa edad

Yo no pude evitar toser muy fuerte por la impresión, Janet me miró, pero noté que ella estaba algo avergonzada.

—¡Aunque seas un Dios no permitiré que digas cosas personales como si nada!— gritó ella al aire

Si le hablas o no adivinas la edad de una mujer esta se enojara, es una ley universal que aplicó con todo rigor para quien me hable. Volviendo al tema, note en Janet que el suelo a sus pies empezó a vibrar como si quisiera liberar algo que presentía la tierra.

—Solo dame los deseos y me iré, ella podrá tener su vida normal y usted podrá ser libre

—¿Otra vez en confinamiento solitario?, no gracias— dijo Loki enseguida

Era obvio que él diría eso... pero en mi caso... escuchar que podría librarme de todo mi peso... si con 2 deseos que llevo mi vida ha dado un giro, pienso que eso conllevaría a una sana destrucción...

—¿Y tú? ¿Qué dices? Aun si Loki dice que no, tú te puedes librar de tener que recolectar los deseos de los demás mortales— dijo Janet extendiendo la mano— sabes que es algo bueno, no volverás a pasar por eso, ni por otra cosas mas

Eran palabras dulces, palabras que quería escuchar, era demasiado tentador, si ella era alguien que Loki conocía debió saber sobre lo que hice, y sobre el resultado... extendí la mano casi tocando la de ella... más sin embargo, sentía algo, una rigidez en mi cuerpo, como si me advirtiera de algo, como dije antes, el ser una solitaria experimentada por un tiempo me había mejorado algunas habilidades... y una de ellas claramente era la auto-destrucción, y en la mayoría de las veces era algo que amaba de mi misma y eso que no soy una "S" o una "M", solo es mi forma de ser... aunque suene lo mismo.

Janet parecía complacida, hasta que pase mi mano por debajo la de ella y no pude evitar tocar uno de sus pechos, eran suaves al tacto a pesar de la ropa, lo presione un poco, sentí un ligero peso y elasticidad increíblemente suave y buena.

—Estas cosas son grandes... ¿son reales?— pregunté mirándola

Eran copa "F" yo apenas soy copa "D" así que quería preguntar y hacerlo, Janet había quedado rígida, quite mi mano al sentir una sed asesina de parte de ella, pero al parecer mantuvo la calma a pesar de tener una vena en la frente demasiado notable.

—En serio no entiendo a los mortales— dijo ella mientras se acomodaba nuevamente los lentes, pero esta vez con los dedos, rompió el lapicero y la libreta que tenía, sin perder la cordura y compostura—, podría saber ¿por qué?

Yo me quedé pensando... Era obvio, pude ir a otros lugares, no podía comunicarme bien del todo con los que tienen el deseo, pero vamos, ¿Dioses, sujetos como Janet en este mundo y posiblemente poderes sobrenaturales y cosas así por el módico precio de tu estado emocional? Yo ya estoy rota, y aun así sé lo que hago, no sé dónde terminaré, pero algo sí es seguro, no quiero que otros tomen algo que por derecho es mío.

—No sé, solo diré que no me gusta deberle nada a nadie, si me disculpas tengo pocas horas antes de caer dormida así que me iré

Me levante tomando mi bolso de donde yo estaba, ella parecía desconcertada por lo que dije

—Espera... ¿acaso no entiendes realmente lo que pasa?— preguntó a mis espaldas

Me detuve sin voltear hacia ella.

—¿Debería? ¿me crees demasiado tonta como para confiar completamente en el dios del engaño?— pregunté sin mirarla—, Yo tomé esto porque es mi culpa, no sé si realmente yo fui la responsable, pero sé cómo me comporto cuando estoy ebria, así que es mi responsabilidad el arreglar lo más que pueda mis desastres, y alguien como tú que solo viene y pide las cosas como si realmente alguien accediera enseguida, no puede comprenderme en esto, eres como el vendedor en la calle que muestra los perfumes en el rostro de los peatones esperando a que alguien lo tome sin más, y eso es odioso

Me aleje sin esperar respuesta, después llegué a mi casa y Loki estaba ahí mirándome.

—Si dices algo que no quiera escuchar te sacaré a patadas de aquí

—Ella, la mujer a la que le dijiste eso, es Maelstrom, una de las más fuertes de las Valkirias, y quien se supone debe cuidar que no escape de mi confinamiento

—¿Hablas de la versión amazónica de tu mundo? Ya me lo temía, aunque parece que lleva buen tiempo aquí

—Los turnos son de 200 años cada uno, no me sorprende que ella pueda comportarse entre los mortales... ¿Estás bien así? Se te acaba de ir una gran oportunidad para tener una vida tranquila

—Dije lo que tenía que decir, no puedo retractarme de ello... Además, no sé cómo acomodar mis tiempos... no tendré tiempo para descansar

—Oye, ¿era una mentira el que no tuvieras días libres?

—Lo es, pero yo prefiero así, quiero hacer lo que no hice durante un mes—Dije con una pequeña convicción, aunque eso era una molestia tenía que hacer horas extras si es que quería recuperar mi salario normal, era un costo que bien podría costarme mi salud, pero necesidad es necesidad

Me abrí paso, desayune algo rápido que prepare y me tire en mi cama para dormir temprano.

—Sabes que ella hará lo posible por convencerte... no la conoces como yo— dijo Loki desde la puerta

—Ella mantuvo compostura entre toda la gente en el parque, si no le importara llamar tanto la atención hubiese hecho algo más fuerte, ya déjame dormir

Loki me miró como si no comprendiera realmente la situación, pero realmente no me importaba, estaba demasiado cansada como para pensar en eso y empecé a dormitar entrecerrando mis ojos.

—Desire... ni que fuese como las demás empresas... fin de semana... te extrañaré un tiempo...

A la mañana siguiente tenía razón en lo último de mis palabras antes de dormir, no era como en la que trabajaba, era una mega-corporación, mi cara o más bien mi expresión no tenía precio, la razón era el ver a Janet enfrente donde trabajó con un gran grupo de gente de 7 sujetos y mujeres de manera bien formada y alineada que parecían ser más militares que trabajadores, sus rostros serios fuesen hombres o mujeres denotaban una máxima seriedad y orden demasiado pesado para algo como la empresa donde trabajo donde podías irte si el jefe se embriagaba en su oficina, o en los almuerzos podemos hacer pequeñas reuniones como si fuesen estudiantes... No digo que fuese una gran empresa, pero tampoco que no fuese importante lo que se hace ahí.

—Ni siquiera dejas respirar— dije al acercarme a Janet con una indiferencia natural y clara molestia

Ella me miro con su típica seriedad incomparable, vestía lo mismo que el día de ayer, pero era de color más negro de pies a cabeza, tenía el cabello suelto y un ceño fruncido ante lo que dije.

—Tú y otros de tus compañeros vendrán con nosotros, mientras tanto mis compañeros ocuparan sus puestos

—Por lo que veo detrás de ti, diré que los mataras de trabajo, ellos no son tan extremos como tú, salvo yo, otras dos mujeres, un espía varón y Jack mi amigo

—¿4 de ese tipo y yo traje a 7? Deberían ser más serios y tener más trabajadores

—Búrlate lo que quieras pero hacemos lo que podemos, no como alguien que repite el proceso cada vez que puede, ¿eso es una ventaja no es así?

Ella me tapó la boca enseguida me jalo hacia atrás y miro enojada.

—No puedes decir eso si no sabes a lo que te atienes— dijo en un susurro

Quite las manos de ella de mi boca y también le enfrente, su presión era grande, pero yo apenas logré no inmutarme ni mirar a otro lado

— Lo se Maelstrom— dije con una sonrisa— se a lo que me atengo, ¿no lo grabaste ayer en la tarde?

Ella parecía congelarse enseguida, yo le pase de lado.

»Hagas lo que hagas, no podrás hacerme cambiar de parecer, además, pronto descubrirás que no fue buena idea hacer esto

Mientras hacía mis cosas Jack parecía hipnotizado por Janet... aunque ella era una inquisidora, él parecía un masoquista, no le importaba que ella le miraba con la presión que ejerce desde su forma de actuar, hasta la expresión sus soldados estaban pegados a las ventanas como si esperaran órdenes, me dieron ganas de regarlos con agua para que no se secaran.

—Al bebe se le cae la baba— dije al darle un codazo en la costilla a Jack

Jack se limpió la saliva apenas escurriéndole con la muñeca derecha de su camisa. Los demás hombres de mi área de trabajo estaban igual que él.

—Perdón, pero ella es una hermosura— dijo con una voz libidinosa

—Sí, lo es... lástima que sea tan vieja como tu abuelo

Eso lo frenó en seco y me miró, yo también lo hice y asentí.

—Valkiria... amigo, un humano y algo así solo pasa en LN— dije con una seriedad y sentido común absoluto

—Lo sé, pero... pero... ¡PERO!... es el sueño de alguien como yo... imposible, imposible

Parecía que quería llorar, no lo culpo, realmente alguien de su tipo quisiera algo como esto, pero aquí y justamente a mí me está pasando... si hubiese sido hombre me hubiese lanzado enseguida aunque me cortara la cabeza, pero ahora necesito tenerla en mi cuello para pensar cómo librarme de esto.

—No hay pero que valga, te comprare cualquier juego que quieras cuando salgamos, ¿sí?— dije mientras suspire

El solo asintió limpiándose una lágrima de su ojo derecho. La puerta de la oficina de nuestro jefe se abrió, de ahí salieron Janet y él, pero se veía que el ambiente se había congelado enseguida como la abrieron, era una presión demasiado fuerte, más si podías ver sus ojos, uno lanzando llamas como si fuese un demonio, la otra lanzando miradas que congelarían a cualquiera, al parecer mi jefe era el único que no se dejó llevar demasiado como sus empleados... bien por él.

—¿Está seguro de hacer esto?, está perdiendo la oportunidad más grande de su vida— dijo Janet con una seriedad tan aplastante que era como si todos alrededor sintiéramos algo recargarse en nuestra espalda

—Demasiado seguro como para decir de nuevo que no

Las palabras de nuestro jefe empeoraban el ambiente, hasta deje de trabajar porque sentí que algo o más bien, uno de los dos iba a explotar enseguida de un mal paso, Janet sonrió, esa no era una sonrisa de rendición, era una de no querer conseguir lo que quería, la conocía bien.

—Como usted quiera, debe querer mucho a sus empleados como para no hacer un intercambio

Mi jefe sonrió de una manera más escalofriante.

—Pensé que las mujeres empresariales de su grado podrían ver lo que pasa realmente—dijo como si comprendiera algo—, en serio, las mujeres novatas como tu deberían aprender el sentido común de ser alguien importante para una compañía

¡Escuché un crujido fuerte, y creo que no fui la única! Todo el mundo se quedó en silencio y se preparó como si estuviera a punto de aterrizar un avión con un motor averiado.

—¿Podría explicarme lo que es si es posible?—preguntó Janet algo más furiosa que aquella vez que lo hice yo

Mi jefe se cruzó de brazos, por primera vez quería admirarlo... si fuese años menor y no tuviese a Rogue.

—No es que no quiera hacer esto, pero se las cualidades de cada uno de mis trabajadores, lo sé desde que tengo las entrevistas de trabajo y si decido contratarlos, los más jóvenes son los más iniciados, los colocó a un lado de gente que lleva algo de tiempo, cuando veo que conectan y saben cómo es el lugar, si aquel maestro logra algo importante, tiendo a darle la oportunidad de cambiar a algo mejor, es una cadena de favores tanto para mí como para ellos, sus trabajos son importantes, porque cuando se quejan, debe ser por algo ajeno a este lugar, aquí solo he escuchado cosas sobre el trabajo, además que eso me deja con más currículos para entregar a otras empresas para un intercambio que valga y más trabajo para mantener está empresa, se cómo tratar a mis empleados como quiero que me trate alguien superior

Después de decir eso miró a las plantas (los que estaban pegados a las ventanas)

»La seriedad y eficiencia es importante, pero ¿qué pasa cuando es demasiado para el trabajador?, tus empleados han estado en la ventana por más de 3 horas sin moverse, estamos a 25 grados, las ventanas aumentan los rayos de sol... ¿no crees que ellos estarían inconformes en algún momento y te dejarán sola?

¡El ambiente se volvió más frío que antes!, esas eran palabras que bien podría decir yo, pero necesito tiempo para prepararme, pero mi jefe lo hace como si fuese una plática normal.

»Yo solo contrato a jóvenes promesas, si no me satisfacen a mi o a lo que trabajamos en su esfuerzo, les doy las gracias y listo, doy solo una oportunidad, una sola, los que piensan que las segundas oportunidades no valen la pena o es que no saben lo que realmente hicieron bien a la primera vez, yo soy de esos y estoy satisfecho de que no me he equivocado en lo que pienso, a pesar de que muchas personas que me digan pestes a mis espaldas

Dio un paso frente a Janet.

»O frente de mí

Terminó de decir y se expresó de una manera tan parecida a cuando el dios sol se enfrentó a un demonio, solo que eran casi de la misma estatura.

«MIERDA, ¡QUE HOMBRE TAN GENIAL!» pensé en mis adentros emocionada y sé muy bien que no soy la única que pensó eso

Janet se quedó sin palabras, su expresión decía que quería decirle muchas cosas pero no encontraba las palabras correctas, solo chasqueo la lengua dio la vuelta y se fue con sus soldados. Mi jefe suspiro y regreso a su oficina, entreabrió la puerta y se detuvo

—Vuelvan a trabajar

Nadie respondió, ni había necesidad de hacerlo, solo lo hicimos porque era nuestro trabajo, estaba algo emocionada y con un poco de alegría... hasta que sonó mi teléfono y noté el mensaje.

Salí otra vez tarde, casi siempre soy la única en irme así que avance hacia el parque, le di algo de dinero a Jack para que se comprase lo que quisiera, espere un momento mientras el sol se ocultaba en el horizonte.

—Una cosa es saber rendirse, otra cosa es que no se entienda que no... ¿acaso aplicas la teoría de la locura?—pregunte a quien me veía desde un árbol

—Holo, conque tú eres

Escuche la misma palabra, pero era de un tono diferente, si venia de donde había escuchado, pero quien apareció fue una niña, de solo 9 años, vestía una camiseta, una gran capa roja en la espalda con capucha, tenía vendas en las muñecas y entre los dedos de sus manos, botas militares de camuflaje verde y un blúmer de estudiante japonesa color negro hasta las rodillas... no pregunten como se eso si ya saben que tengo un amigo otaku.

Su rostro era uno extraño, algunas pecas en las mejillas, una mirada filosa y algo loca al mismo tiempo, tenía heterocroma (un ojo verde y el otro negro) una sonrisa con varios dientes que pensé que no era normal.

Mis sentidos gritaban peligro inminente como cuando es tu primer día en la piscina o el mar, era pequeña, pero se notaba que realmente desprendía algo indescriptible, un horror y una fuerza brutal.

—Tú debes ser quien acompaña a "L"...—dijo esa niña sin quitarse la sonrisa de su rostro al hablar

Me dieron escalofríos las palabras que venían de esa niña, inconscientemente retrocedí unos pasos, ni siquiera lo pensé, creo que mi inconsciente se unió esta vez para alejarme de ahí. Pero una parte de mí no se movió... tal vez era el miedo o el horror de ver algo como esto... o más bien, sentirlo... ahora sé cómo se sienten los que están a punto de morir. La niña solo me miró y dio un paso hacia atrás apuntó al centro de la ciudad.

—¿Podrías acompañarme un momento?— preguntó al mirarme

Ella avanzó sin esperar mi respuesta, mi cerebro e inconsciente parecían jalar la palanca de mando para irme, pero yo me resistí, si, sé que suena imposible, pero tenía que, mi voluntad de hacer cosas estúpidas era como el loro verde maldiciéndose a sí mismo por sus impulsos estúpidos.

Avance unos pasos atrás de la niña, ella caminó como si conociera el lugar

—Oye, acércate, no muerdo tanto, solo cuando duermo— dijo como si fuese un chiste—estos dientes son míos, pero algunas veces se mueven solos por las noches

Avanzamos entre las calles, algunos autos pasaban cada 2 segundos, era viernes, era obvio, no sé si esto era una tortura para mí, la gente nos miraba como si fuésemos una pequeña familia, algunos sonreían yo tuve que hacerlo de manera algo forzada, avanzamos entre la gente, habían algunos puestos ambulantes con comida frita, el olor era algo agradable para alguien hambriento que podía decirse peligroso pero delicioso por razones de salud... pero eso obviamente no importaba en absoluto si era algo para el paladar.

»Oye, oye, ¿puedes comprarme esto?— preguntó la niña al apuntar a un puesto de tacos cercano a una esquina—, ¿por favor?

Su cara y sonrisa no habían cambiado a algo lindo ni que me hiciera hacerlo, pero la gente alrededor me miraba inclusive el vendedor esperaba el sí a pesar que ella no se dirigió a él.

Tuve que, ella pidió 2 de cada 8 diferentes clases de tacos, yo solo pedí un refresco normal. Estuve esperando junto a ella, parecía ver el procedimiento para hacer los tacos... o más bien la carne y lo demás, su primera orden llegó, pero antes de que empezara a comer la toque del hombro

—¿Podrías decirme quién eres?— pregunte sin más

—Ha, cierto, cierto... mi nombre es Mugni, y soy un primogénito de Thor

Quería escupir lo que estaba a punto de tomar de mi refresco, pero me contuve con una tos que no deje salir, ella empezó a comer con avidez los tacos.

—¿Podrías dejar eso?— pregunte al tomar una servilleta y limpiar su boca

—¿En serio no me crees?

—Loki me mandó un mensaje que decía "él está aquí", además, no sé si sea cierto, pero ¿no una vez te disfrazaste de mujer para engañar a un gigante y recuperar tu martillo y casi te casas con ese gigante según la leyenda? Quiero creer que estás tomando ese ejemplo con esto

Ahora ella quería escupir la comida, pero tomó una servilleta y se limpió el rostro porque casi sale lo que estaba masticando y lo había tapado con la mano derecha. El encargado del puesto no se inmuto, o el parecía creer que estábamos locos o había algo que no dejaba entender la situación.

—Ese Loki... ese hermano mío siempre arruinando mis sorpresas—dijo ella al terminar de limpiarse el rostro

—Entonces, ¿qué busca el dios que casi no es digno de un martillo?— pregunté al terminar mi refresco—, ya tengo suficientes problemas con mis pagos de tarjeta de crédito por lo que compra Loki como para que venga alguien como tu

La chica, Thor me miró todavía sin perder la sonrisa.

—Según sus leyendas en papel, hay una chica que ocupa mi lugar temporalmente, y varias cosas locas que no se acercan a lo que realmente me pasa casi siempre que estoy en alguno de los nueve reinos...— dijo al volver a tomar otro taco de doble tortilla—, pero lo que siempre dicen que es cierto... es que él es realmente malo, alguien que es incapaz de controlarse a sí mismo por su naturaleza, yo por mi parte soy salvaje, si, lo acepto, sé que tiendo a no ser muy inteligente, y por eso Loki me ayuda si se lo pido o si la situación es grave y él lo sabe...

Comió otro taco y espero a que lo pasara para volver a hablar, para ser alguien de una tribu que se decía sucia y muchas cosas, él (o en este caso ella) al menos era alguien decente, pero después eructo como si fuese un adulto... casi decente.

»El punto es que él te eligió porque le interesas, yo los he observado, a pesar de que llevas apenas 2 deseos, has sabido cuales son los más fuertes, Munin te ayuda en ello, pero tu complementas el trabajo con acercarte a la gente de una forma temeraria y directa, para después machacarlos como si fuesen insectos... admiro eso de ti

—En primer lugar, soy así, en segundo eres un maldito Stan y tercero, no me gusta la forma en la que dices eso

—Pero...

—Sí, sé que dirás que es cierto, pero mi perspectiva es diferente— interrumpí algo molesta—, tú dices que los machaco y no sé cuánto, pero por mi parte, solo hago lo que sé mejor hacer... hablar con franqueza, será su decisión si toman para bien o mal mis palabras, no me importa, siempre y cuando no me afecte en absoluto

Thor sonrió aún más fuerte con una expresión casi horrenda para una edad de 9 años.

—En serio, Loki se ha encontrado a alguien interesante... aunque esta plática va para más, pero tengo que irme, tengo algo que decirte

El bajo de su asiento limpiándose las manos y me apuntó con el dedo.

»Pronto nos volveremos a ver, puede ser mañana o cualquier día de las semana, pero quiero ver cuánto es que ustedes dos han avanzado en esta carrera

Eso último me hizo reaccionar rápido.

— ¿Hay alguien más aparte de mí?

—¿Crees que nuestro padre Odín dejaría solo a Loki en uno de sus mayores desastres?— preguntó Thor extendiendo las manos—, solo diré que con quien estoy lleva 23 deseos

—¿!23!?—grité impresionada

—¿Pues a cuantos les diste deseos?—pregunto el como si se lo hubiese guardado para el final

Ni yo misma pensé que llegaría a un número de 23.

—En fin, nos vemos luego— dijo al despedirse y desaparecer entre la gente

Yo pague los tacos y me fui de ahí, solo empecé a reír un poco... sabía que esto iba a ser difícil, pero creo que ya superó un poco mis expectativas.

Después de eso fui hacia un bar cercano a la ruta hacia mi casa, aún tenía tiempo de tomar el último autobús así que decidí tomar unos tragos para calmar lo que había pasado, camine como si nada entre la gente y las luces de la ciudad alumbrando una noche de inicio de fiesta en los diferentes lugares, personas paseando y música alrededor de puesto ambulantes y tiendas cercanas, era un ambiente nocturno demasiado normal, entre al bar más cercano, me senté en un banco y le pedí al cantinero dos shots de tequila...

«Esto sonó como una canción antigua, solo que no estoy con falta de amor» pensé para mí misma

Me tome uno, no era tan fuerte, pero si me hizo hacer una pequeña mueca, después de tomar 4 más salí de ahí y me fui a la parada de autobuses, no estaba muy mareada pero si estaba sintiendo el mundo alrededor, momentos después llegué, veía a algunas personas en el borde esperando, a otros recargados en los anuncios mirando sus teléfonos, y al vigilante casi dormitando en su pequeña caseta de reducido espacio, había una máquina de café a un lado.

Pero había algo que me llamo la atención, había una niña de 13 años mirando el mapa de la ciudad en sus manos, mire alrededor y la gente la estaba ignorando, de cabello largo, hasta la mitad entre los hombros y espalda media, color negro y de una manera se veía grisáceo en algunas partes se veía linda con una horquilla de flor que le acomodaba un fleco, la ropa que portaba era un atuendo casual, una playera delgada blanca y una camisa gruesa azul, con un pantalón café algo grande para ella ya que le cubría los zapatos un poco. Era como para protegerla de todo, aunque me sorprende el que como habría llegado hasta aquí, mire después la caseta y el vigilante parecía entender lo que iba a decir.

—La niña a estado así por más de 3 horas, muchos le han dicho que le ayudan pero ella se niega a hacerlo, inclusive no nos dice ni su nombre o número de teléfono de alguien conocido de ella para que viniera— dijo el vigilante al salir de su caseta—, hasta se molestó porque lo hiciéramos, así que la gente se cansó y la dejo por si sola, si llega a irse llamaré a una patrulla para que venga por ella

Seguía mirando al policía pero este ignoró mi vista, creo que sabía lo que realmente pensaba, solo suspire, yo también era de esos que dejaban a los demás con sus problemas, pero el sentido común en mí era más grande que mi ignorancia... además de ser mala con niños como estos.

Le arrebate el mapa de golpe y la niña me miró, inclusive el policía quiso detenerme, pero yo solo mire el mapa, la niña trató de quitármelo a gritos y pegándome, pero yo la alejé con una mano.

—Ha, vas por mi rumbo— dije al dárselo—, qué sorpresa

Ella lo tomó y parecía furiosa, quiso alejarse pero no se movió, y parecía lista para decirme algo y yo le gane.

—Tienes que entender algo, en vez de enojarte conmigo debes enojarte contigo misma, has estado como tonta por más de 3 horas, la gente te ignora por que se cansa de querer ayudarte, si no piensas al menos en pedir un poco de ayuda no podrías salir de aquí, y lo último, este lugar cierra en 1 hora, ¿dónde te irías si te dicen que te vayas? ¿No estarías dispuesta a que te llevaran a la estación de policía sin que preocuparas más a tus padres cierto?

Ella se detuvo, lo pensó mejor y miro hacia enfrente, por el rabillo de mis ojos note que la gente se había calmado y que parecían darme razón.

—¿Puedes llevarme?— preguntó la niña aceptándolo

—No sé, estoy medio ebria así que me siento insegura de ello— respondí alejándome de lo que acabo de decir—, ¿no tienes número telefónico?

Ella presionó un poco su ropa y negó algo avergonzada

—Lo perdí... y quien espera son mis padres... no conozco a nadie más... pero no tengo miedo... solo inseguridad

Eso explicaba mucho de lo que pasó, realmente es una niña insegura.

—Si te sientes más segura con alguien en mi estado... lo haré, solo si me ayudas a despertar donde te diga... por ahora esperemos hasta que llegue el autobús

Esperamos recargadas en un asiento vacío, el silencio era no incómodo, sino normal, la gente pasaba, subía y otra más gente estaba esperando como la anterior. Yo seguía algo mareada pero estaba tranquila, el vigilante me dio café... creo que era su forma de decir que había hecho un buen trabajo a pesar de mi modo de hacerlo ya que no me miro.

«No hubieras hecho esto si no querías hacerlo» pensé mientras lo tomaba

—G-gracias—dijo la niña con un tono avergonzado

Yo la mire a un lado, ella se veía algo nerviosa, no la culpo, si hubiese tomado un poco más estoy segura que me estuviera durmiendo de pie, pero había algo que se me hacía familiar, pero mi ebriedad parecía tomar fuerza así que se me hizo difícil decir que era.

»Es mi primera vez en este lugar... mis padres trabajan en el extranjero, y vinieron aquí por cuestiones laborales... se supone que debimos encontrarnos en la tarde... pero perdí su número... sabía dónde bajar y todo, más sin embargo no sé cómo llegar... así que gracias

—De nada... por cierto, por tu acento, ¿vienés igual del extranjero?— pregunté interesada

—¿Eh?... si, vengo de Noruega... creo que es difícil hablar este idioma para mí, pero... me estoy esforzando

Me quedé pensando en lo que dijo... realmente se veía extranjera... pero había algo en ella que me hacía sentir que la había visto en otro lado... mientras pensaba note que el autobús había llegado, nos subimos y le dije que me despertara 4 estaciones después.

De una manera horrible soñé con Janet, su mirada, su expresión de todos míos, más que nada porque era una valquiria y según muchas influencias culturales y de ficción, se dice que su naturaleza es salvaje, en serio, 150 años aquí es mucho... no creo que haya alguien que logre domar a alguien así, por mi parte Jack me soporta y yo soporto sus pláticas de animes y cosas por el estilo, Rasmus también nos soporta a los tres, pero sin llegar a más cosas... dudo que algún día haya alguien que me haga sentir rara, creo que estoy en el mismo barco que Janet.

Sentí que alguien me movía y desperté enseguida, la niña y yo descendimos del vehículo, nos fuimos por el mismo camino en una avenida no muy cerca de donde vivo, realmente era algo tarde, pero todavía podía descansar un poco antes de mañana. Doblamos la esquina, cerca un muro largo hasta la otra calle de 2 metros de altura, vi un auto negro avanzar lentamente con luces altas, era una Hummer negra, la niña corrió hacia ella y yo me quede ahí, creo que ese era el auto que había dicho ella, vi que las puertas se abrieron, descendieron dos personas de manera apresurada.

—Madre, padre, los encontré— dijo la niña al acercarse a la ventana

Era una de las escenas que ni aunque fuera por un deseo no destruiría, algo lindo, pero el rostro de esa mujer se me hacía algo muy familiar... trate de buscar entre mi mente aturdida, no había muchas mujeres que conocía que eran de otro lugar. Pero mi cerebro reacciono sabía quién era, no la había reconocido por que no había visto esa expresión antes, más bien, se podría decir que era una faceta oculta recién descubierta como su aparente forma de ser... sabía que esa niña me daba la sensación de alguien, ¿pero algo así?

—Déjenme decirles, una mujer ebria me trajo

—¿Mujer ebria?— preguntó el padre algo impresionado—, ¿y no te hizo nada malo?

—¿Puedes decirnos donde esta?— preguntó la mujer con un tono frío

—Sí y esta... ya no está... que raro, pero era una persona mala y responsable... aunque su modo de ayudarme era molesto

Ambos se quedaron en silencio, creo que miraron hacia mi dirección, pero realmente me había ocultado.

—Como sea, vámonos, nos tenías realmente preocupados Valery— dijo la mujer ya calmada

Yo estaba escondida pegada a una esquina, nerviosa, y algo intrigada y desesperada a tal punto que sentí que el corazón se me quería salir del cuerpo, escuche el auto venir, ni siquiera supe como pero logre escalar los dos metros del muro que hasta hice ladrar al perro que estaba en el patio de esa misma casa, la Hummer paso y yo baje hasta el suelo sosteniéndome con las manos y riendo de nervios.

—Denme un respiro... por favor— fue lo que logré decir