25 de Abril
—¡Vamos hombre! ¿A donde se fue toda tu motivación para entrenar?
—Ngh... No... te burles... de mi.
Aquí nuevamente Kisaragi Rikka para informar del progreso del entrenamientos. Anteriormente comencé a escribir este diario para poner mis pensamientos e impresiones en orden, ahora lo uso como registro del entrenamiento de Riochiro.
Para empezar, la primera fase del entrenamiento de Riochiro va a consistir en su mayor parte en entrenamiento físico, esto con el objetivo de que recupere y aumente su masa muscular.
Ya que normalmente los niños de nuestra edad no están tan desnutridos como el, empezamos a alimentarlo correctamente. Cinco comidas al día, o sea se: Desayuno, merienda, almuerzo, merienda diurna y cena.
Gracias a su dieta y a los ejercicios que les hemos mandado a hacer, Riochiro a mostrado un gran umbral de recuperación de sus heridas y un aumento de grasa corporal, eso según los análisis del doctor que le traemos a este lugar para que lo examine cada Domingo.
Ahora, en mi perspectiva... Lo sigo viendo un poco escuálido, aunque a lo mejor eso se deba a que su estatura es baja y se ve un poco mas pequeño que los demás. Sea lo que sea, me alegro que se este recuperando.
Respecto al entrenamiento que le mandamos, pues la verdad, le puse una "falsa meta" que cumplir.
-100 Sentadillas.
-100 Abdominales.
-100 Flexiones.
-Y correr 10 km.
Siendo objetivamente sinceros, yo alcanzó todo eso en un día con mucho trabajo y esfuerzo, también que el proceso puede ser autodestructivo.
No obstante. Le puse esa "falsa meta" para que se empeñara mas en alcanzarla, así como un objetivo a largo plazo para que dominara los ejercicios básicos. Esto lo hago por la experiencia que tuve entrenando a los demás hijos de nobles. La verdad, no se que pasa con los hombres, pero cuando escuchan que pueden o deben alcanzar un numero alto, como que se vuelven locos.
Esto lo voy a remarcar entre comillas para que destaque:
"100 es el numero mágico."
Ahora mismo, Riochiro esta por la flexión numero 30. Nada mal, ha hecho dos tandas de flexiones (15 cada una) y ahora esta por su ultima repetición, anda empujando con todas sus fuerzas para poder empujar su cuerpo hacia arriba.
Si le sacas conversación en este punto, te responderá como como alguien que tiene estreñimiento mientras esta haciendo lo suyo, Solo es una costumbre que tengo con él, pero me encanta molestarlo cuando esta así.
—Vamos, mides menos que yo a pesar de ser un chico ¿Y apenas puedes levantar tu propio peso?
—CALLATE Y DEJAME CONCENTRARME JODER.
Si, esa reacción es la que queria ver, su cara roja como un tomate debido a la fuerza que esta haciendo en el ejercicio y la mejor parte, su expresión. Pero la dejare a tu imaginación, abuelito.
1 de Julio
Después de madrugar, como siempre, seguí mi rutina casual. Después de terminar de hacer ejercicios, me di un baño, terminé el desayuno que me había preparado Haru y luego me aliste para ir a despertar a Riochiro con el plato de desayuno que tu habías preparado.
Para mi sorpresa, cuando llegué al centro del laberinto, Riochiro estaba despierto y para mas inri, estaba tomándose un café con el jardinero, o bueno, intentando tomarse el café ya que al dar el primer sorbo hizo una mueca por la amargura del café.
—Bleh... ¿Como diablos se puede tomar "esto" Señor Kawashima?
—Con el tiempo te acostumbras a su amargura mi querido Takanashi.
—No puedo visualizarme a mi mismo tomando esto con tanto gusto como usted.
—Solo date tiempo Takanashi, mientras tanto, solo síguelo probando, seguro que le encuentras algo bueno.
Riochiro se le quedó mirando fijamente a la taza de café, seguramente pensando tomársela de un sorbo para terminar con esa amargura y no malgastar nada, aunque todavía seguía dudando si tomársela o no.
Me acerque a la mesa donde estaban sentados los dos. Y de el termo donde le echaste la leche a Riochiro, saque un poco de leche y se la eche al café de Riochiro.
Tanto el jardinero como él, me miraron extrañados, como si acabaran de notar mi presencia. Bueno, aunque ese es el caso, al final del cuentas los dos son demasiado entretenidos.
—Si le hechas un poco de leche al café, su sabor sera mas apetecible, eso es lo que yo hago—Le dije a Riochiro mientras calculaba cuidadosamente que cantidad de leche echarle al café para que la taza no se desbordara.—
—Oh Rikka, buenos días.—Me dijo Riochiro extrañado—
—Buenos días Señorita Rikka, espero que su sueño halla sido placentero—Me dijo el jardinero despues de inclinarse y ponerse su mano en el pecho para saludarme.—
Terminando de mezclar el café con la leche, con una pequeña cuchara que estaba encima de la mesa les dirijí la mirada a los dos.
—Buenos días para los dos, vine para darle el desayuno a este muchachon de aquí—Dije en un tono animado mientras ponía la bandeja encima de la mesa para luego sacudirle el hombro a Riochiro.—
Riochiro por su parte, frunció el ceño por algunos instantes, ya que sabia que ese comentario estaba dirigido hacia su estatura. En realidad solo era un chiste sarcástico, pero Riochiro se suele tomar muy en serio este tipo de bromas, sobre todo cuando es sobre los defectos de su persona.
Aún así, Riochiro empezó a comer el abundante desayuno, en el proceso apaciguando sus molestias. Devoraba vorazmente todo lo que estaba encima del plato, entonces una vez que se tomó tiempo para respirar dirigió su mirada hacia mi.
—Como siempre, el sazón del viejo Ryuugamine es una delicia, ojala tu tuvieras la habilidad para cocinar de "esta" manera, lastimosamente, por lo que me contaste los otros días, no es el caso.
Riochiro soltó unas pequeñas carcajadas antes de que le que lo fulminase con la mirada y este se me quedase mirando con su típica expresión de mocoso engreído.
Sabia que teclas tocar para molestarme.
Veras abuelo, unos días atrás mientras tu estabas en otra dichosa reunión, le conté a Riochiro que hace unas semanas atrás casi quemó la cocina mientras te ayudaba a cocinar su desayuno. Entonces, cada vez que tiene la oportunidad, el muy desgraciado me lo saca en cara, es exasperante, hay veces que lo quiero golpear.
Para rematar, cuando llegó aquí, casi ni hablaba y en caso de que hablase, pues era muy serio. Pero desde que aprendio los diferentes usos del lenguaje, este maldito ha estado mejorando en el arte de las papeadas.
Bueno, al menos eso confirma de que soy buena maestra...
—Claro, los desayunos que preparaba el Señor Ryugamine siempre eran los mejores—Dijo el jardinero.—
Riochiro lo miró con un poco de curiosidad, tratando de analizar lo que habia intentado decir.
—¿El viejo también te preparaba desayuno?
—No solo a mi—Recalcó—A todo el personal de la mansión. Él a veces tomaba el lugar del cocinero y nos preparaba un rico desayuno a todos. Gracias a él, todo el personal se levantaba con energías para el trabajo. Ah—Agregó— también prepara el mejor café que he probado.
—¿Incluso mejor que el tuyo?—Riochiro preguntó—
—El mio es un intento de copia de su café. Aunque tengo que decir con todo humildad, que es un intento de copia muy bueno.
Riochiro volvió a mirar discretamente hacia donde estaba ahora su taza vacía de café.
—Pues me encantaría probar el café del viejo alguna vez.
Media hora despues, el jardinero se había retirado a hacer su trabajo alrededor de la mansión y Riochiro estaba dentro de su habitación preparándose para el entrenamiento.
Salio con solo un pantalón puesto, no tenia nada arriba y tampoco zapatos, por lo que me impresionó mucho, no solo su despreocupada apariencia, si no también viendo su físico.
El niño delgado y pálido que había visto llegar a la mansión hace unos meses atrás, no se parecía en nada a este. Ya los resultados del entrenamiento se estaban haciendo visicbles en su cuerpo.
Riochiro, a pesar de no haber definido ni hecho un volumen "notable", sus musculos estaban empezando a marcarse en su cuerpo, las diferencias del antes y el despues de comenzar su entrenamiento, me satisfacen como su maestra.
Aunque...
—¿Por qué estas semi-desnudo?
—Porque no me quiero poner la camisa de compresión, es algo apretada y me resulta incomodo tener una tela haciéndome presión en la piel.
—¿Esa es tu escusa?
—Eh...
—Mira, la camisa de compresión esta hecha para que el sudor se escurra de la parte superior de tu cuerpo, asi la tela de tu pantalón no tiene que verse manchada por el sudor, para eso te la dí.
—Pero-
—Nada de peros, ve y pontela.
—Vale—Dijo Riochiro cabizbajo al ver que me estaba imponiendo sobre él. Al verse inofensivo ante mis argumente, fue el doble de daño emocional para él.—
—Y también ponte los zapatos, no queremos tener que parar tu entrenamiento debido a las ampollas.
—Esta bien.
Despues de un momento de espera, Riochiro salio completamente vestido, listo para comenzar su entrenamiento. Al verlo, asentí con entusiasmo.
—Maestra Rikka, tengo una pregunta—Dijo mientras trataba de morderse la lengua, intentando prevenir decirme "Maestra"—
Veras abuelo, esto se debe porque meses atrás le "impuse" que me tendría que decir maestra, a lo cual el se veía muy reacio a esa idea. Al principio, iba a dejar pasarle esta falta a Riochiro, pero viendo su reacción, simplemente lo obligue.
Y tu te preguntaras "¿Para que?" Bueno, simplemente para molestarlo y ya, no es nada mas complejo que eso.
Nota de tu Abuelo: Deja de molestar tanto a el hijo de los Takanashi, si sigues así te va a coger odio. Te quiere, tu abuelito Ryugamine.
—Dime cual es tu duda mi "pequeño" alumno—Enfatice en pequeño.—
—Tch.—Chasqueo Riochiro mientras me miraba con el ceño fruncido— Vera Maestra, cada vez que estoy al llegar al objetivo de el entrenamiento que me encomendó, aumenta el numero del total de repeticiones a las que debo llegar... ¿Por qué lo hace?
Bueno, aunque intentaba que no pensara en eso, la verdad es que los numero no eran algo que se pudiera ocultar, tampoco es que fueran muy sutiles que digamos.
Al pasar de los meses, media a Riochiro y veía como rápidamente avanzaba y se acercaba a su objetivo, así que gradualmente aumente el numero de repeticiones y de kilómetros que tenia que correr.
Bueno, para no hacerte el cuento largo, abuelo. Actualmente, a la cantidad de repeticiones que Riochiro debe alcanzar son las siguientes:
-420 sentadillas
-500 flexiones
-300 abdominaels
-Y correr 30 km
Un aumento bastante considerable si me lo preguntas.
—Simplemente veo que lo tienes muy fácil, así que trato de hacer que sudes la gota gorda. Recuerda que estas aquí para hacerte fuerte y proteger a tu hermana, o ese es el objetivo que me dijiste.
—Pues si, llega a ser verdad pero...—Riochiro arrastró la "o" por un par de segundos, como si estuviera pensado si decirme lo que pensaba a continuación— ¿Cuando me volveré fuerte?
Cuando lo escuche, pude ver, el muchacho estaba desesperado por poder, simplemente quería hacerse fuerte lo mas rápido posible, quería ver los resultados su esfuerzo de estos últimos meses.
Para su mala suerte, la respuesta era lo contrario que quería escuchar, ya que sé por experiencia propia, que el poder no llega así por así, hace falta sacrificio para poder alcanzar la fuerza necesaria para proteger a los demás, y no solo eso, ya que en el caso de Riochiro, él debe ser tan fuerte como para proteger a su hermana y así mismo.
—Pronto lo seras, dentro de 5 años, cuando acabe el entrenamiento, lo veras—Dije con cierto temblor en la voz, ya que lo que estaba diciendo era incierto, pero era una pequeña mentira para que él no se desanimara— Mientras tanto —Me acerque a él y levante su rostro, poniendo las manos en sus cachetes— Confía en mí, como tu maestra, te aseguro que te volveré un super humano.
Riochiro se quedó en silencio, mientras dirijia su mirada hacia el piso, para luego, simplemente asentir de manera caga y desanimada.
¿Falta de confianza hacia a mi? No sabría decir debido a que es esa reacción, pero por el momento creo que me aguantare las ganas de golpearlo.
Y así empezó el entrenamiento de el día de hoy.
Parte 2
11 de Octubre
Los avances de Riochiro en el entrenamiento, han sido fructíferos y super veloces para lo que son mis estándares. De hecho, había días en los que pensaba que Riochiro iba a romperse por el trabajo y el esfuerzo que estaba poniendo en el entrenamiento. Pero su determinación es firme y su motivación ardiente, es como si no hubiera nada que le pudiese poner freno a la hora de alcanzar sus objetivos.
A pesar de ahora tener 10 años, su cuerpo esta fibrado y musculoso, aunque puede que su aspecto se deba a su corta estatura. De todas formas para las personas bajitas es muy fácil desarrollar masa muscular, pero nunca me imagine ese tipo de físico en un niño.
Sus músculos se marcan en su piel y sobresalen de ella, haciéndola parecer una lamina fina y brillante de metal, casi como si fuese papel de aluminio.
Recomendación para tus desayunos: Abuelo, parece que Riochiro tiene mucho musculo, pero poca grasa corporal, habrá que meterle una dieta mas pesada, para que al menos su cuerpo se queda equilibrar.
—Maestra Rikka ya termine—Dijo Riochiro mientras se aproximaba por mi espalda.—
—Ya te dije que solo Rikka, lo de añadir "Maestra", era solamente una broma.
—Lo siento pero ya me acostumbre a decirte así, además que "Mestra Rikka" suena mejor.
—Has lo que tu quieras.
Aunque hace unos meses le impuse que me debería decir "Maestra" cada vez que entrenáramos. Pensándolo bien el tono formal me molesta, es como que pone mucha distancia entre Riochiro y yo.
Aunque ser llamada "Maestra" no esta mal de vez en cuando para que se pusiera molesto, pues como ves, eso solo funcionaba antes, con el tiempo se acostumbro a decirme "Maestra Rikka" y ahora hasta que lo prefiere.
Nota de tu Abuelo: Ohhhhh! Con que le estas tomando cariño a el muchacho ¿Sera lo que me imagino?
Nota de Rikka: Abuelo si vuelves a jugar con eso me voy a enfadar y no te voy a hablar en 1 mes entero.
Parte 3
11 de Abril(1 er año de entrenamiento completado.)
Después del 9no mes de entrenamiento, Riochiro había alcanzado completamente su umbral físico, o bueno, su umbral hasta que empezara a desarrollar. Al fin y al cabo todavía no esta en la adolescencia.
Así que decidí hacer tiempo y saltar del entrenamiento físico a la parte de educación pura y dura. Para ello hice que el jardinero entrar unas cuantas montañas de libros hacia el centro del laberinto.
En la primero vuelta, el pobre Kohei se veía demasiado exhausto, así que para la segundo le tuvo que pedir prestado el poder a Uemi, eso hizo sus idas y venidas mas llevaderas.
Una vez que hice de la habitación de Riochiro, casi de una biblioteca, pues simplemente lo empece a enseñar. Para mi mayor sorpresa me tope con que el no sabia ni leer ni escribir.
Aunque no me hallas dicho nada aún sobre lo que paso antes de que Riochiro y Kyouka llegaran a nuestra mansión, me puedo imaginar mas o menos la vida que llevaban ellos antes de que los recogieras.
Nota de tu abuelo: Tu solo enséñale, cuando llegue el momento aclarare todas tus dudas. O quizás Riochiro te lo cuente primero que yo. Quien sabe.
Con lo anterior en mente, ya sabia mas o menos por donde empezar. Así que decidí ser practica y enseñarle yo misma a leer y escribir sin necesidad de darle un libro o algo por lo que guiarse.
Pasaron varias horas y para mi grata sorpresa Riochiro atendía y se concentraba en la clase, mientras clavaba el ojo en mi y en lo que le estaba enseñando.
Normalmente los otros chicos que me habías traído con anterioridad se dormían o simplemente ni siquiera entendida. Para serte sincera abuelo, ahora que ha pasado mucho tiempo después de eso, a la mayoría los tuve que electrocutar.
Nota de tu abuelo: No te hubieses molestado en decirme, con razón y se retiraban tan rápido diciendo "Oficialmente ya no le deben ningún favor a mi familia." Siéndote sincero... Hiciste bien, es mejor que se fueran rápido a que gastaras tiempo con ellos, al fin y al cabo a mi tampoco me gusta la gente arrogante.
Entonces Riochiro, poco a poco empezó a poder escribir y leer a lo largo del día, aunque le faltaban muchas letras y vocales por aprender.
12 de Abril(segundo año.)
Salia de la mansión, ya eran casi la 6:00 de la mañana por lo que el sol estaba saliendo por la parte de atrás de la mansión. Caminaba nuevamente por el sendero principal para llegar al laberinto.
Pero fuera de la mansión me llamaba algo la atención, aunque solía ser algo casual en estos días. Eran Anne-Nee estaba haciendo un entrenamiento de combate con Kyouka.
Aunque Anne-Nee, ya la conocemos por ser despiadada enseñando, parecía tener mano suave con Kyouka, pero mi pensamiento no duro mucho en mi cabeza hasta que empezó a chocar espadas (De madera) con su respectiva alumna.
Anna-Nee usaba su Skill contra la pobre niña, sin que esta pudiese hacer mucho para esquivar sus veloces ataques cargados de electricidad, suerte que las espadas eran de madera.
Entre bramidos Kyouka se quejaba.
—¡Eso es injusto maestra! ¡Yo no tengo habilidad!
Con la queja, Anna ne empezó a hablar, aunque seguía atacando despiadadamente a Kyouka sin parar ninguna vez sus lluvia de rápidos en incesantes golpes.
—¿Injusto? ¿En un combate real, cuando las cosas han sido justas?
—¡Agh! ¿No deberías usar tu Skill cuando al menos yo despierte la mía?
Anna-Nee ahora si paró sus interminables ataques hacia Kyouka y se postro de pie ante ella, mirándola con cierta severidad. En sus ojos se reflejaba cierta crueldad reveladora.
—¿Y si nunca desarrollas una Skill?-Dijo Anna-Nee mientras levantaba nuevamente la espada y la abalanzaba sobre Rikka, esta bloqueo el ataque, pero solo por los pelos— ¿Si antes de que desarrolles el Skill alguien que si tiene Skill te ataca nuevamente?—Lanzó otro ataque, pero esta vez, lanzó la espada que Kyouka tenia en la mano hacia el aire, la niña se retorció del dolor sórdido que le recorría todo el brazo—Tu y tu hermano estariais condenados ¿Verdad?
Algo en las palabra de Anna-Nee desperto un sentimiento en los interiores de Rikka, que ahora con cierta fiereza en sus ojos, la miraba fijamente.
—Eso no va a volver a pasar—Dijo mientras que en el interior de sus ojos salio una chispa de determinación.—
Aunque algo inusual ocurrió después.
Anna-Nee abalanzó nuevamente su espada hacia la pequeña niña sin ninguna piedad mientras decía:
—¡Entonces demuéstramelo!
Kyouka esquivo el golpe de la espada , aunque por los pelos.
—¡La determinación de proteger a tu familia! ¡Afila tu determinación! ¡Ella es la única que te impulsara hacia delante!
Anna-Nee aplico electricidad en sus pies y de desplazó hacia Kyouka con tremenda velocidad, mientras que lista para abalanzar su espada de nuevo, se posicionaba delante de la niña.
Pero antes de que pudiera abalanzar nuevamente la espada de madera hacia Kyouka, a este se le empezó a erizar el pelo y la piel, para luego transmitir cierta sensación familiar hacia los alrededores.
Anna-Nee se paro en seco y retrocedió hacia atrás a la velocidad de una flecha. Segundos después la electricidad empezó a desbordarse afuera del cuerpo de Kyouka.
Rayos y centellas empezaron a rebotar por la hierba de los terrenos que rodeaban a Kyouka, mientras que esta gritaba de dolor.
Segundos después, Kyouka perdió la consciencia, cayendo pesadamente en el suelo. Anna-Nee y yo nos quedamos mirando la uno de la otra por unos instantes. Algo sorprendente había ocurrido.
Kyouka, había despertado su Skill.