Capítulo 154 - Domesticando las Ruinas Antiguas - 6

Ren fue el primero en intentarlo. Acostumbrado a moverse por los pequeños túneles secretos que había hecho, no le resultó difícil escurrirse.

Min le siguió, aunque tuvo que contorsionarse un poco para pasar. Su serpiente permaneció manifestada, siendo larga pero no gruesa logró deslizarse por la grieta con relativa facilidad, sus escamas brillando en la extraña luz.

Taro permanecía mirando la apertura con aprensión.

—No voy a caber —declaró después de estudiarla—. Soy más... robusto.

Intentó meter un hombro, pero su ancha espalda hizo el paso imposible. Después de varios intentos frustrados, Ren comenzó a reír.

—¿Qué tiene de gracioso? —gruñó Taro, aún atascado a medio camino.

—No siento nada peligroso aquí... Desactiva el caparazón —sugirió Ren entre risas—. Tu escarabajo está en tu cuerpo para poder pasar, pero no necesitas mantener todas sus características manifestadas.