(Dominic se despierta de golpe, empapado en sudor. Se toca el cuello, respirando agitado, pero poco a poco se calma).
(Se levanta y mira por la ventana. Afuera, el viento sopla con fuerza y el frío es intenso. Se abriga y, mientras se viste, piensa en Eleanor y Elena. Toma algunas mantas de un cesto y sale de su habitación).
(Dominic baja las escaleras en silencio y sale del palacio. Afuera, Oswald ya lo espera junto a la carroza. Al verlo, levanta una mano en señal de saludo.)
-Oswald: ¿Todo listo para partir?
-Dominic: ¡Sí, vamos!
(Suben a la carroza y emprenden el viaje. Mientras se alejan del reino, Dominic observa las calles con el ceño fruncido).
(La escena cambia a Eleanor y Elena, acostadas en el suelo con una manta delgada cubriéndolas. El viento aúlla con fuerza).
(Eleanor duerme, pero Elena sigue despierta, mirando a su madre con tristeza. Sus labios están secos y partidos por el frío. Sus lágrimas empiezan a caer).
(Eleanor despierta al sentirlas y, con suavidad, las seca con los dedos).
-Eleanor: No llores. No vale la pena llorar por un imbécil como él. Lo más probable es que no venga a salvarnos... Pero no te preocupes, mientras yo esté aquí, nadie te hará nada.
(Ambas quedan en silencio, mirándose con tristeza. De pronto, Elena se sobresalta al escuchar algo acercándose. Se sienta rápidamente y se seca las lágrimas).
-Eleanor: E-él de verdad...
(Una carroza se aproxima a toda velocidad. Oswald grita para que los caballos se detengan y, cuando lo hacen, Dominic salta de inmediato).
(Elena y Eleanor lo miran sorprendidas. Elena siente cómo su corazón late con fuerza).
(Dominic les hace un gesto con la mano. Elena, sin dudarlo, se levanta y corre hacia él).
-Eleanor: Hija...
(Elena lo abraza con todas sus fuerzas, gritando entre lágrimas).
-Elena: ¡GRACIAS! ¡GRACIAS! ¡GRACIAS POR VENIR!
(Dominic, sorprendido por la fuerza del abrazo, la rodea con los brazos).
-Dominic: Les prometí que vendría.
(Elena lo suelta y Eleanor se acerca, dudosa).
-Eleanor: Yo... no pensé que vendrías, niño.
-Eleanor: ¿Puedo abrazarte también?
(Dominic sonríe).
-Dominic: ¡Claro!
(Eleanor lo abraza brevemente y susurra un "gracias").
-Dominic: ¿nos vamos?
(Los tres suben a la carroza mientras Oswald los observa).
-Dominic: Les presento a mi amigo, Oswald.
(Elena y Eleanor lo saludan y la carroza reanuda su marcha).
-Dominic: Les traje esto.
(les entrega las mantas).
-Elena y Eleanor: ¡Gracias!
(De pronto, el estómago de Elena ruge).
-Dominic: Cuando lleguemos a Stormwind comeremos algo. Por ahora, duerman, el viaje es largo.
-Eleanor: Gracias por esto... Nos salvaste de ese viejo.
-Dominic: No iba a permitir que les pusiera un dedo encima.
-Dominic: Conociéndolo, seguro las hubiera convertido en esclavas.
(Dominic baja la mirada. Un flashback golpea su mente: dos niñas cubiertas de sangre).
-Dominic: Ya lo he visto antes... y no dejaré que pase otra vez.
(Eleanor traga saliva. El ambiente se llena de un silencio tenso).
-Dominic: Pero ahora están a salvo. Descansen, debieron pasar una mala noche con este frío.
-Eleanor: Sí, tienes razón...
(Ambas se acurrucan con las mantas y cierran los ojos. Dominic las observa con una leve sonrisa, mientras Oswald lo mira en silencio).
-Oswald (pensando): Ya entiendo, Dominic... Estás salvando vidas, tal como lo hiciste conmigo.
(Se enfoca en Dominic, quien las observa dormir con alivio).
-Oswald (voz en off): ¿Cómo me salvó este niño?
(La historia de Oswald comienza).
(Mi nombre es Oswald Ravenshield. Tengo 28 años. Siempre fui un campesino esforzado, trabajando desde que tenía apenas 8 años. Mi vida ha sido una constante lucha por sobrevivir.)
(Comencé a trabajar desde temprana edad, pero tuve la suerte de llegar a unas tierras donde me trataban bien. Tenía lo suficiente para vivir en paz: un lugar donde dormir y comida. Un día llegaron nuevos trabajadores, cuatro hombres de mediana edad y una mujer joven. En ese momento yo tenía 18 años. Siempre que llegaban trabajadores nuevos eran hombres.)
(Ella era una mujer hermosa, a pesar de llevar un trapo de ropa y tener el pelo desordenado. Los trabajadores nuevos se presentaron, pero yo estaba concentrado en contemplarla. Llegó su turno de presentarse. Estaba ansioso. Entonces tomó aire y gritó:)
—¡ME LLAMO ISOLDA, TENGO 18 AÑOS Y SI ALGÚN VIEJO PERVERTIDO INTENTA ABUSAR DE MÍ, LE CORTARÉ LA GARGANTA!
(Todos se quedaron en silencio. Ella nos miraba con cara de querer asesinarnos. Entonces, de repente, todos comenzaron a reírse.)
-Isolda: ¡¿DE QUÉ SE RÍEN, VIEJOS DESGRACIADOS? ¡LOS VOY A CORTAR EN PEDAZOS, HABLO EN SERIO!
(Todos seguían riendo. Yo era el único serio. No me causó gracia. Ella parecía decirlo en serio. Fijó su mirada en mí y volvió a gritar.)
-Isolda: ¡TÚ! ¿CUÁNTOS AÑOS TIENES?
(Tartamudeando, respondí.)
-Oswald: ¿Eh? Y-yo...
-Isolda: ¡Sí, tú! Pareces ser el más joven aquí. ¿Cuántos años tienes?
-Oswald: Eh... tengo 18.
-Isolda: ¡ENTONCES TÚ DORMIRÁS CONMIGO!
-Oswald: ¿Eh? ¿Por qué yo?
(Ella, enojada, respondió.)
-Isolda: ¡¿ACASO QUIERES QUE DUERMA SOLA?!
-Isolda: ¡¿QUÉ PASA SI ALGÚN VIEJO ENTRA MIENTRAS DUERMO?!
-Isolda: ¡TÚ DEBERÁS DEFENDERME!
(Los trabajadores comenzaron a burlarse.)
—¡ESO ES, OSWALD! ¡LLEGÓ TU MOMENTO, HAZTE HOMBRE!
—¡RECUERDA APLICAR LAS TÉCNICAS QUE TE ENSEÑE, OSWALD!
(Isolda estaba roja de la vergüenza.)
Isolda: ¡AHHHH, VIEJOS CERDOS!
(Isolda vino hacia mí y tomó mi brazo.)
-Isolda: ¡Vámonos de aquí antes de que mate a todos estos viejos!
(Ella me arrastró lejos. No conocía el lugar, solo caminaba en línea recta. Avanzó lo suficiente hasta que quedamos solos. Se detuvo, se volteó, se rascó la cabeza de manera confusa y dijo:)
-Isolda: Eh... oye, ¿sabes dónde estamos?
(Me quedé en silencio, la miré y comencé a reír sin parar. Isolda ya no estaba enojada y, casi riendo también, dijo:)
-Isolda: Malo, no te rías.
(Controlé mi risa, me calmé... y volvió a salirme otra carcajada.)
-Isolda: ¡YA DETENTE!
(Ella se contagió de mi risa.)
-Oswald: Perdón, sígueme. Te mostraré el lugar.
(Oswald le enseñó el sitio a Isolda hasta llegar a la choza donde dormía.)
-Oswald: Aquí es donde duermo.
-Isolda: Entonces aquí dormiré también.
-Oswald: Bueno... sí.
(Entraron a la choza. Era pequeña, pero cabían dos personas.)
(Isolda se sentó en el pequeño colchón de paja donde dormía Oswald. Apenas se sentó, se puso de pie rápidamente y comenzó a observar por las pequeñas ventanas.)
-Oswald: Bien, no hay ningún viejo pervertido afuera.
(Isolda se sentó de nuevo. Oswald la miró y pensó: "No quiero imaginar qué le habrá ocurrido en su pasado. Tiene un carácter fuerte, pero aun así se ve tan frágil. Yo... yo quiero protegerla.")
-Oswald: Isolda.
(Isolda lo miró.)
-Isolda: ¿Sí?
-Oswald: Me gustaría saber más de ti. ¿De dónde vienes?
-Isolda: Yo vengo del reino de Eldoria.
-Oswald: ¡¿Eldoria?! Es el reino más grande y poderoso de todo el mundo. He escuchado historias de algunos trabajadores viejos que han estado allí. Solo hablan maravillas de ese lugar.
-Oswald: Eh... ¿cómo se llamaba el rey de ese lugar? ¡Ah, sí! El Rey Jeremiah.
(Cuando Oswald mencionó al rey, la expresión de Isolda cambió a una más seria.)
(Oswald, emocionado, le contó todo lo que sabía del reino de Eldoria.)
-Oswald: ¿Y cómo llegaste hasta aquí?
(Oswald notó el cambio en Isolda. Su expresión se había vuelto más sombría.)
-Oswald: ¿Pasa algo? Si no quieres contarme, no pasa nada.
-Isolda: No, estoy bien.
-Isolda: Estoy segura de que quieres saber por qué me comporté así con esos viejos.
(Oswald también se puso serio y la escuchó atentamente.)
(Yo prácticamente crecí en los pasillos de la realeza, mi madre era sirvienta en palacio de la realeza de Eldoria.)
(Éramos, yo, mi madre, y mi hermano. Mi hermano era mayor, el tenia 15 años cuando yo nací. El también ejercía en el reino como sirviente.)
(Mi hermano fue quien me crio casi toda mi infancia, eran pocas las veces que ella era una madre conmigo, ella la mayor parte del tiempo era la sirvienta del rey. Esto creo en mi una insensibilidad hacía ella. No la odiaba pero, me daba igual lo que hiciera, para mi no existía hasta que ella me buscaba.)
(Con mi hermano esto era diferente, era lo que más amaba, y era lo único que tenia. Le conté cómo me sentía respecto a nuestra madre, el se enojo conmigo, y decía que nuestra madre hacía más de lo que yo creía por nosotros, esas palabras nunca me entraron en la cabeza, simplemente sentía que ella nunca se preocupo por nosotros.)
(Cuando cumplí 15 años comencé a trabajar también. Hacía exactamente lo que hacía mi hermano y mi madre. Servir al rey. Cuando comencé a trabajar mi hermano había ido de viaje. Acompaño al hijo mayor del rey.)
(El primer día que trabajé, sorprendentemente, mi madre me ayudó y me explicó lo que tenía que hacer. Nunca antes se había preocupado por algo que yo hiciera. Al final me di cuenta de que solo lo hacía para que sirviera al rey lo mejor posible.")
(Cada vez que me explicaba algo, terminaba diciendo: 'RECUERDA QUE NUESTRO QUERIDO REY SE PONDRÁ TRISTE SI HACES ALGO MAL' o 'PIENSA SIEMPRE EN DAR LO MEJOR DE TI PARA QUE EL REY ESTÉ CONTENTO'. ¿Qué mierda le pasa? Pensé que por fin se preocupaba por mí, pero en realidad solo le importaba que hiciera bien mi trabajo para que el rey no se enojara.)
(Eso me dolió un poco. La flor se marchitó antes de crecer... Aprendí rápido lo que debía hacer y al día siguiente, mi madre ya no me buscó para ayudarme. Me sentí un poco aliviada, porque me ponía los pelos de punta escucharla repetir una y otra vez que debía satisfacer al rey.)
(Mi día fue relativamente un éxito, hice todo lo que me pidieron al pie de la letra. Al tercer día también cumplí con todo lo que me pidieron, ese día también llegaba mi hermano de su viaje.)
(Cuando estaba por terminar mi jornada, una sirvienta se acercó a mí y me dijo: —¿Eres Isolda, cierto? —Sí, le respondí. —El rey Jeremiah quiere hablar contigo. —¿Eh, por qué? ¿Hice algo mal? Ella me miró fijamente, dio media vuelta y se marchó.)
(Me quedé sola, en silencio. Comencé a caminar hacia el trono del rey, y en mi mente sonaban las mismas preguntas una y otra vez: ¿Hice algo mal? ¿Está enojado conmigo? ¿Me echarán del reino?)
(Llegué al imponente trono del rey, sintiendo una presión enorme. Tenía la cabeza agachada, casi sin poder respirar. Entonces escuché una voz profunda que me preguntó: —¿Eres Isolda? ¿La hija de Rosalie? —Sí... respondí, tartamudeando. Mi madre se llamaba así, lo había olvidado por un momento. —Tu madre es una persona importante para mí. Entre todos los trabajadores de este reino, ella tiene algo especial. —Me pregunto si tú también posees lo que hace a tu madre tan especial.)
(aún seguía mirando el suelo, lentamente levanto la mirada, y veo al imponente rey sentado en su trono.)
(Me miró fijamente y, lentamente, una sonrisa comenzó a formarse en su rostro.)
-Jeremiah: Sí, definitivamente eres tan especial como tu madre.
(Cuando dijo eso, mi hermano apareció detrás de mí, exaltado. Me di media vuelta y lo miré. Estaba sudando, jadeando por la falta de aire.)
-Isolda: ¿Hermano?
(El se recupera y me abraza fuertemente)
—¿ESTÁS BIEN? ¿TE HICIERON ALGO? ¡CUÉNTAMELO POR FAVOR!
(No entendía por qué mi hermano se comportaba así. Él me abrazaba cada vez más fuerte. Podía sentir la mirada penetrante del rey sobre nosotros.)
-Isolda: Estoy bien, tranquilo.
(El me toca la cara con sus manos desesperado)
-Jeremiah: Erian...
(Mi hermano me suelta y mira al rey de una manera desafiante.)
(Mi madre aparece. Adelanta unos pasos a mi hermano y se arrodilla ante el rey.)
-Rosalie: ¡OH, MAJESTAD! ¿ACASO MIS HIJOS LES HAN CAUSADO ALGÚN PROBLEMA?
(El rey mira fijamente a Roselie.)
Jeremiah: Es correcto. Tu hijo se interpuso en mis planes. Recuerdo que dijiste que el no causaría problemas.
-Roselie: Lo sé. Y lamento haber roto mi palabra.
(Roselie se levanta, se da media vuelta y comienza a golpear sin piedad a Erian.)
-Roselie: BASTARDO MAL AGRADECIDO, COMÓ PUEDES DESOBEDECER A TU REY.
-Roselie: ¿DESPUÉS DE TODO LO QUE TE HA DADO ASÍ ES COMO LE PAGAS? !MALDITO BASTARDO!
(Estaba paralizada. No entendía nada, solo observe como mi madre golpeaba e insultaba a mi querido hermano.)
(Ella se detiene. Mi hermano queda tirado en el piso.)
Roselie: !LEVANTATE Y PIDELE PERDON A TU REY!
(Mi hermano se levanta lentamente. Y se arrodilla frente al rey.)
-Erian: Disculpeme querido rey por haberle causado problemas. No se volverá a repetir jamás.
(El rey riendo dice)
-Jeremeiah: !HAHA! Acepto tus disculpas.
-Jeremiah: Roselie. Ve con ellos y edúcalos mejor. Para que no se vuelva a repetir. Bueno... si quieren hacerme este espectacular show de nuevo bienvenido sea.
-Roselie: Entendido. Isolda, Erian, nos vamos.
(Mi hermano sigue a mi madre, y noto que el rey me mira fijamente. Sigo a mi hermano y mi madre)
(Mi madre nos lleva a nuestra habitación, cierra la puerta y comienza a regañar a mi hermano nuevamente)
-Roselie: ¿¡Estas consiente de lo que acabas de hacer!?
(Erian solo mira el suelo y no dice nada)
-Roselie: Bastardo mal agradecido. No puedo creer que hicieras enojar a la persona que te lo ha dado todo.
(Erian sigue si decir nada. Roselie lo abofetea)
-Roselie: ¿¡Que mierda tienes en la cabeza?!
(Erian se da media vuelta y mira a Isolda que estaba sentada en la cama mirando todo)
-Erian: Lo siento por lo que vas a ver Isolda.
(Luego de decir eso voltea y golpea a su madre en la cara. La empuja hacía la pared y comienza a darle patadas en su estomago. La jala del cabello y la arroja al piso. Brinca sobre la cabeza de su madre y comienza a saltar sin piedad mientras grita:)
-Erian: ¡PERRA DE MIERDA ¿QUE, QUE YO TENGO MIERDA EN MI CABEZA?!
-Erian: ¡¿QUE MIERDA TIENES EN LA CABEZA TU?! IBAS A DEJAR QUE ESE VIEJO DE MIERDA VIOLARA A MI HERMANA .
(Erian explota contra su madre, mientras la abofetea sin piedad, la mujer intenta luchar contra el pero el hijo mayor esta consumido por el odio)
(Isolda al escuchar esto recuerda las miradas tétricas del rey)
-Erian: ¡¿NO LE BASTA CONTIGO?! ¿¡CREES QUE NO SE LO QUE HACES CON ESE VIEJO!?
-Erian: ¡TÚ ESTAS ENFERMA IGUAL QUE ESE VEJESTORIO DE MIERDA!
(Los golpes a su madre ya eran violentos, pero Erian cada vez que hablaba golpeaba más fuerte y rápido)
-Erian: ¡MALDITA!
(Erian deja de golpear a su madre, Y se levanta y la observa retorciéndose del dolor, el rostro de Roselie esta cubierto de sangre, ella tiene los ojos bien abiertos. Ella estira su mano hacía Erian)
-Erian: ¡VETE DE AQUÍ ANTES DE QUE TE MATE!
(Roselie intenta levantarse y cae. Erian La agarra del pelo, abre la puerta y la saca violentamente. Ella queda tirada afuera de la habitación.)
(Erian la observa y la escupe. El entra a la habitación y cierra la puerta. Isolda y Erian se miran, El tiene las manos y la ropa cubiertas de sangre. Isolda abre la boca y no le salen las palabras. Pero las lagrimas no tuvieron problemas en salir.)
(Isolda estalla en llanto y Erian la abraza)
-Erian: Nos vamos. Nos iremos inmediatamente. Hoy se acaba todo.
-Erian: Seremos felices, te lo prometo.
(El llanto de Isolda continua mientras su hermano la abraza fuertemente. Ella se logra calmar y se quedan en silenció, El silenció es interrumpido cuando golpean la puerta.)
(Ambos miran la puerta con los ojos bien abiertos, Erian se levanta y camina lentamente hacía la puerta. La persona que esta fuera sigue golpeando. El se queda parado frente a la puerta y la abre. Es el rey)
FIN CAPITULO 2.