Un Golpe de Espada, Un Hombre Lanzado al Aire

—¿Cómo podría el cultivo del Tercer Cielo hacer algo así?

Lin Qi y los demás miraron a Jing Yan conmocionados. Sus ataques contra el Rey Tigre Manchado de Piedra se habían detenido.

Por supuesto, después de que Jing Yan asestara un golpe mortal con su espada en el punto crítico del tigre, la bestia prácticamente perdió su capacidad de contraatacar. Incluso sus poderosas defensas y energía vital no fueron suficientes para superar eso.

Después de apuñalar la garganta de la criatura, Jing Yan solo retrocedió ligeramente para esquivar el no tan amenazante contraataque del Rey Tigre Manchado de Piedra. La Espada Luz de Luna entonces volvió a golpear rápido como un rayo, apuñalando con precisión la garganta del tigre nuevamente.

¡Rugido!

El Rey Tigre Manchado de Piedra se retorció frenéticamente, pero el resplandor ardiente en sus ojos rojos inevitablemente se desvaneció.

—¡Listo! —dijo Jing Yan.

Jing Yan se volvió hacia Lin Qi y los demás con una sonrisa en su rostro.

—Es más fácil dar el último golpe, por supuesto —suspiró Jing Yan para sí mismo.

¡Eso era cierto!

Si el grupo de cinco guerreros no hubiera agotado primero más de la mitad de la energía del Rey Tigre Manchado de Piedra, no habría sido tan fácil para Jing Yan matar a la bestia. Después de todo, era casi tan fuerte como una Bestia Espiritual de Cuarto Grado. De hecho, incluso si el tigre estaba gravemente herido, todavía habría sido difícil para Jing Yan golpear su Punto Acupuntura de la Muerte dos veces seguidas sin que los otros guerreros distrajeran a la bestia.

El Rey Tigre Manchado de Piedra, que era casi tan fuerte como una Bestia Espiritual de Cuarto Grado, sin duda era muy desafiante de manejar.

—Ahora voy a tomar mi parte —dijo Jing Yan mientras se adelantaba para quitar el Cuerno de Carne semitransparente de la cabeza del tigre.

—¡No! —alguien gritó.

Era Lin Hu. Estaba mirando furiosamente a Jing Yan.

Jing Yan apareció al azar, lanzó dos golpes casi perezosos al Rey Tigre Manchado de Piedra, y luego quería llevarse la mitad del valor del Rey Tigre Manchado de Piedra para sí mismo. Por supuesto, no estaban contentos con eso.

—¿Qué, van a retractarse de su palabra? —Jing Yan hizo una pausa y giró ligeramente su mirada hacia Lin Qi.

—Jing Yan, eres un poco demasiado codicioso al pedir el Cuerno de Carne del Rey Tigre Manchado de Piedra —dijo Lin Qi. Estaba tratando de averiguar el verdadero nivel de Jing Yan.

—¡Así es! Los cinco hemos estado luchando durante tanto tiempo. Tú estás solo. Si vamos con lo que dijiste, entonces te llevas la mitad para ti, pero los cinco juntos tenemos que repartirnos la otra mitad entre nosotros. ¡Eso es injusto! —Lin Ruoyu también dijo.

Lin Ruoyu era la única guerrera entre los cinco discípulos del Clan Lin.

—¿Injusto? —preguntó Jing Yan con una burla, levantando las cejas—. Antes de que yo les ayudara a matar al Rey Tigre Manchado de Piedra, ¿por qué ninguno de ustedes dijo nada sobre que era injusto? Ahora que la bestia está muerta, ¿dicen que es injusto? Bueno, bueno. Saben muy bien que si yo no hubiera intervenido, habría sido casi imposible para ustedes cuatro matar al Rey Tigre Manchado de Piedra. Algunos de ustedes podrían haber muerto en la lucha.

—Lin Qi, ¿vas a retractarte de tus palabras? —preguntó Jing Yan, dirigiendo una mirada dura a Lin Qi.

Lin Qi era, después de todo, el líder de los cinco.

—Jing Yan, si no hubieras aparecido de repente y nos hubieras distraído, Dongyang no se habría lastimado. Si Dongyang no se hubiera lastimado, solo habría sido cuestión de tiempo para que matáramos a ese Rey Tigre Manchado de Piedra. Ahora, no te haré responsable de eso. Aquí hay 10 Piedras Espirituales. Solo tómalas y vete —Lin Qi sacó 10 Piedras Espirituales.

Lin Qi realmente quería matar a Jing Yan. Anteriormente, había aceptado la oferta de Jing Yan porque quería que el Rey Tigre Manchado de Piedra matara a Jing Yan. Cuando los ataques de Jing Yan habían derribado al tigre en momentos, lo había tomado completamente por sorpresa. Ahora Jing Yan quería que cumpliera sus palabras y renunciara al tesoro que estaba justo frente a él.

El valor de un Rey Tigre Manchado de Piedra era simplemente demasiado tentador.

—¡Diez Piedras Espirituales! ¡Qué generoso! —Jing Yan estalló en carcajadas y le dio a Lin Qi una mirada de desprecio. Sus ojos se oscurecieron—. Me voy a llevar el Cuerno de Carne del Rey Tigre Manchado de Piedra, sin importar qué.

—¡Si quieres el Cuerno de Carne del Rey Tigre Manchado de Piedra, necesitas pedir permiso a mi cuchillo! —gritó Lin Hu mientras su Qi Vital surgía dentro de su cuerpo. Levantó su cuchillo largo y cargó contra Jing Yan.

—¿Quién te crees que eres? —Jing Yan curvó sus labios mientras se movía.

Aunque Lin Hu estaba en el Quinto Cielo, que era el mismo rango que Jing Yan, su fuerza no era rival para la de Jing Yan. Jing Yan había cultivado el Arco del Cielo, tenía una increíble capacidad de predicción, y también había refinado la Postura del Viento Otoñal y las Hojas que Caen. Jing Yan no habría estado menos confiado si se hubiera enfrentado a Lin Qi, mucho menos a Lin Hu.

Si no hubiera estado tan confiado, Jing Yan nunca se habría revelado a los otros guerreros.

Ya que querían pelear, les daría la oportunidad de pelear.

—¡Quítate de mi vista! —Jing Yan dio un ligero barrido con su Espada Luz de Luna, y una terrible radiancia de espada rompió la red de ataques de cuchillo de Lin Hu.

La habilidad de artes marciales de Lin Hu era una especie de habilidad de cuchillo de Bajo Grado. A los ojos de Jing Yan, tenía demasiados defectos. Incluso un golpe aleatorio con su espada podía golpear una de sus imperfecciones técnicas y atravesarla.

—¡Ah! —Mientras la radiancia de la espada brillaba, el cuerpo robusto de Lin Hu fue barrido más de una docena de metros como una hoja caída en el viento. Gritó mientras se deslizaba hacia atrás.

—No... ¡Imposible! —Aunque Lin Hu fue golpeado y derribado en el aire, su vida no estuvo en riesgo. Jing Yan no había intentado matarlo. Si lo hubiera hecho, sin duda se habría metido en una pelea seria con el resto de ellos. No estaba preocupado por los demás, pero Lin Qi, que estaba en el Sexto Cielo, sería difícil de manejar para Jing Yan.

Así que no pretendía herir a Lin Hu de verdad con el golpe.

Al ver que Lin Hu había sido derribado en el aire por un solo golpe de la espada de Jing Yan, el resto de los discípulos del Clan Lin palidecieron ligeramente. Todos dirigieron sus miradas a Jing Yan con shock y miedo en sus ojos.

—¡No hay manera de que sea del Tercer Cielo!

—¡Mierda! Los rumores no son confiables, de verdad. ¿Qué idiota dijo que el rango de Jing Yan había caído al Tercer Cielo?

—¡Maldición! —Lin Qi y los demás estaban maldiciendo en secreto sobre los rumores poco confiables que habían escuchado.

Aunque el rango de Jing Yan podría haber caído, no había bajado hasta el Tercer Cielo. Derribar a un guerrero del Quinto Cielo en el aire con un solo golpe era una hazaña que incluso un guerrero del Sexto Cielo podría no ser capaz de lograr.

Lin Qi se quedó a un lado, pensando en silencio. Lin Qi sabía que él no habría podido deshacerse de Lin Hu con un solo golpe de espada como ese.

—Ese golpe solo fue para darte una lección. Si no aprendes ahora, entonces no será tan suave la próxima vez —se burló Jing Yan y miró a Lin Hu, que apenas se estaba poniendo de pie. Jing Yan entonces se inclinó ligeramente y cortó el Cuerno de Carne de la cabeza del Rey Tigre Manchado de Piedra.

—¡Hasta la próxima! —Jing Yan guardó el Cuerno de Carne, juntó ligeramente sus manos, y se dio la vuelta para irse.

—¡Hermano Qi! ¿Vamos a dejarlo ir así? —Lin Hu y los demás se volvieron hacia Lin Qi mientras veían a Jing Yan marcharse.

¡¿Cómo podían dejarlo ir así?!

Habían cazado un Rey Tigre Manchado de Piedra, y ahora solo tenían la mitad de su valor.

—Jing Yan es muy fuerte. Está al menos en el Sexto Cielo. Si luchamos contra él, es posible que no podamos derrotarlo —Lin Qi sacudió la cabeza. Por supuesto, tampoco quería dejar ir el Cuerno de Carne, pero no podía hacer nada al respecto ahora. Lin Dongyang todavía estaba tendido cerca, herido. Necesitaban llevarlo de vuelta al Clan Lin para tratamiento. Aunque ya habían usado una Poción Curativa, si esperaban demasiado tiempo, la lesión podría obstaculizar el cultivo futuro de Lin Dongyang.