Sospecha

El rostro de Ryan se tornaba rojo y pálido alternativamente. Como el hijo mayor de la Familia Carter, siempre había estado acostumbrado a ser respetado, ¡y ahora alguien se burlaba descaradamente de él!

—¡Sr. Gray, le insto a que cuide sus palabras!

Natalia sintió una abrumadora ola de resentimiento mientras sus ojos se enrojecían.

—Sr. Gray, no es lo que usted piensa. Mi hermana no tenía invitación...

—¡Señorita Selina, aquí está!

El mayordomo de la Familia Carter bajó corriendo las escaleras, visiblemente sin aliento.

—Por favor, entre rápido. ¡El Abuelo Carter la ha estado esperando durante bastante tiempo!

Las palabras de Natalia se quedaron atascadas en su garganta mientras su rostro se tornaba ceniciento, con un presentimiento inquietante.

Selina curvó sus labios en una leve sonrisa.

—Disculpen por hacer esperar al Abuelo Carter. Pero no fue mi elección quedarme afuera; Ryan y mi querida hermana insistieron en que no entrara.