Más Vale Que Cumplas Tu Palabra

Logan ya había investigado todo minuciosamente—. Angelica se suponía que era la chica que lo había salvado hace cuatro años. Pero por alguna razón, no podía quitarse la sensación de que no era la misma chica.

La de aquel entonces tenía ojos brillantes e inquebrantables, ojos que resplandecían como estrellas incluso cuando estaba cubierta de sangre.

Por un breve momento, Logan perdió la concentración.

Esa tarde, estaban a punto de comenzar las finales del undécimo concurso de diseño.

Los medios y reporteros entraron, y el evento se transmitía en vivo.

Debido a la popularidad de Angelica, sus fans, espectadores casuales y seguidores de celebridades habían inundado la transmisión en vivo.

El lugar bullía de emoción. Selina encontró su asiento, y lo primero que vio fue a un hombre en la mesa de jueces.

—¡Mira a ese hombre, qué cuerpo!

—Ese es el famoso diseñador Rowan.