129: La Sra. Thompson recupera la consciencia, prueba de paternidad_3

Mandel Thompson dijo:

—Mamá, Sylvia, ¿por qué no vas a descansar?

Mary Perryne negó con la cabeza.

—No estoy cansada.

—Hermano mayor, yo tampoco estoy cansada.

En ese momento, la puerta de la sala de emergencias se abrió de repente.

Un grupo de personas con batas blancas salió del interior.

Mandel Thompson se acercó inmediatamente y preguntó:

—Doctor, ¿cómo está mi abuela?

El doctor principal se quitó la mascarilla.

—Sr. Thompson, hemos hecho todo lo posible. Pero la Sra. Thompson es mayor, la cirugía se ha completado, pero sigue en coma. Si puede despertar o no, depende de su fuerza de voluntad.

Al escuchar estas palabras, un destello de triunfo brilló en los ojos de Sylvia Thompson.

Castigo divino.

¡Esto es realmente un castigo divino!

«Es mejor que la vieja bruja muera y trascienda, para dejar de causar daño al mundo».

Al oír esto, Mary Perryne preguntó inmediatamente:

—¿Cuáles son las probabilidades de que mi madre despierte?